Soy de las que, cuando una carne es de buena calidad, la prefieren a la parrilla o a la plancha, para apreciar bien su sabor. Pero, de vez en cuando, me gusta cambiar, y prepararla de forma un poquito más elaborada.
Y éste es un plato muy suave y delicado, que os gustará. La receta no la he inventado yo: está sacada de internet (de varios sitios), aunque con mis "tuneos personales", para variar.
Es importante que solamente selléis la carne, no la hagáis mucho en la sartén; de lo contrario, se resecará demasiado.
INGREDIENTES:
1 ó 2 medallones de solomillo de ternera o añojo por persona (según tamaño y/o hambre de los comensales)
Foie (en cantidad suficiente para colocar un trocito sobre cada medallón).
Para la SALSA MORNAY
100 gramos de queso (la receta original se preparaba con gruyère, pero yo utilicé "Grana Padano"
400 gramos de leche (yo uso semidesnatada)
180 gramos de nata (yo utilizo Crema Ligera Puleva o leche Ideal, que son menos grasas)
50 gramos de harina
50 gramos de mantequilla
Nuez moscada, sal y pimienta
Queso rallado para gratinar
PREPARACIÓN:
Precalentamos el horno a 200-220º.
Sellamos la carne en la sartén, con muy poquito aceite, y sin que se haga demasiado.
Salpimentamos una vez sellada (así no "encoge", y se reseca menos).
Colocamos los medallones en una fuente apta para el horno, y ponemos sobre cada uno un trocito de foie.
Aparte, preparamos la salsa. Yo la hago en Thermomix.
En primer lugar, rallamos el queso: lo ponemos en el vaso, partido en trocitos, damos varios golpes de turbo, y después programamos 5 segundos a velocidad 5.
Añadimos la leche, la crema o nata, la sal, la pimienta, la nuez moscada, la harina y la mantequilla. Y programamos 7 minutos, temperatura 90º, velocidad 4.
(¡Qué foto más horrible!... pero de la salsa no tengo más)
Cubrimos la carne con la salsa...
... espolvoreamos con queso rallado...
... y gratinamos.
Espero que os guste.