Ingredientes
1 placa de hojaldre fresco
6 manzanas reinetas
60 gr de mantequilla
40 gr de azúcar
40 ml de agua
120 gr de azúcar
30 gr de mantequilla
Preparación
Preparamos un par de moldes aros metálicos grandes. Estiramos sobre una placa de horno el hojaldre, recortamos con los mismos aros metálicos las bases en relación a la cantidad de moldes que tengáis. Dejando solo las bases de las tartas ya recortadas en la placa de horno retiramos el resto de hojaldre. Ponemos otro papel de horno y le colocamos peso encima de las bases para que no doblen el volumen consiguiendo una base planita y muy crujiente. El peso puede ser otra placa de horno encima perfectamente. Habiendo precalentado el horno a 180º por ambos lados, colocamos las placas y las dejamos unos 10 minutos hasta conseguir una torta crujiente y doradita. El tiempo varía dependiendo el grosor del hojaldre. Ya tenemos las bases echas, reservamos en sitio seco. Pelamos y cortamos y descorazonamos las manzanas y la cortamos en triángulos o gajos.
En una sartén colocar a fuego fuerte los 60 gr de mantequilla y las manzanas e ir moviendo con cuidado para no romper las manzanas. Cuando empiecen a coger color doradito echamos los 40 gr de azúcar y caramelizamos las manzanas. Las sacamos del fuego y las extendemos en una fuente dándole un golpe de frio.
Hacemos un poco de caramelo en un cazo con el agua y los 120 gr de azúcar. Cuando vaya cogiendo color dorado echamos los 30 gr de mantequilla y mezclamos.
Ponemos la placa en el horno con la misma temperatura (180º), colocamos los moldes metálicos encima y cubrimos por dentro de ellos con un poco de caramelo a cada uno. Colocamos las manzanas dentro de los moldes y dejamos que se hornee 25 minutos. Pasado el tiempo retiramos la placa del horno, la ponemos en un sitio seguro pues vamos a seguir trabajando en ella. Colocamos la base dentro del molde metálico y metiendo una espátula entre el molde y la placa de horno y aguantando la base le damos la vuelta para que la base se quede en la parte de abajo de la tarta.