Voy a utilizar una base de pizza fresca comprada, he intentado que sea de las más naturales: sin aditivos y sin grasas hidrogenadas. (Lo ideal sería hacer la masa desde cero, pero el tiempo en este caso me apremia)
Desenrollamos la masa con el papel y la extendemos en la bandeja del horno. Tarro con tomate frito y brochin de silicona. ( el tomate es de estilo casero con cebolla)
Vamos extendiendo el tomate por la base, hasta que tengamos toda cubierta.(ahora es el momento, de si queremos, esparcir un poco de orégano por encima)
Después esparcimos el queso para pizza, cubriendo toda la base .
A continuación, le vamos a poner 200 gramos de jamón cubriéndola toda.
Vamos a pelar una manzana y a cortarla en láminas finas.
Las pondremos salteadas por la pizza y antes de meterla en el horno ( lo hemos precalentado a 220 grados).
Ahora la vamos a dejar en el de 12 a 15 minutos a 200 grados. Mientras cogemos un papel de los muchos que nos dejan en el buzón y lo extenderemos en la encimera
Voy a utilizar dos berenjenas y tres pimientos rojos. Empezaremos abriendo los pimientos por detras.
Le sacamos todas las pepitas que tenga sacudiendo un poco con la mano y nos ponemos a pelar las berenjenas.
Cortamos la berenjena a la mitad por el largo y después la mitad de esta como haciendo un filete.
Hacemos varios cortes a lo largo y ahora la troceamos como veis (haciendos daditos).
Como veis lo tengo todo prácticamente recogido si manchar la encimera, desperdicios al orgánico y papel con papel.
Ya esta todo en la bandeja, un poco de aceite para los pimientos por dentro y por encima para las berenjenas.
Un poco de sal también y a acompañar a nuestra pizza. ( hemos bajado la temperatura a 170 y la pizza saldrá en 5 minutos)
La pizza ha estado unos 15 / 20 minutos y esta lista para comer.
Ahora nos centramos con las verduras en ir removiendo la berenjena y dar la vuelta a los pimientos de vez en cuando.
Pasado unos 15/ 20 minutos sacamos la berenjena porque ya esta en su punto.
Los pimientos estarán otros 15 minutos mínimo hasta que tengan este aspecto.
Mientras se enfrían un poco ponemos agua en un recipiente para hervir unos nidos de pasta.
Los pimientos siguen calientes pero ya podemos empezar a pelarlos, vamos haciendo tiras con las manos y dejando al lado de las berenjenas.
Ahora estamos poniendo las pieles en un colador y con la ayuda de una cuchara de madera estamos sacando todo el jugo que les queda.
Fase vital: todo el jugo que nos ha quedado en la bandeja del asado, es acompañado con un crorrito de vinagre.
Un crorrito de aceite, removemos todo y escurrimos por el colador para no tener el resto de alguna pepita.
Bueno pues ya esta, un buen plato saludable para mañana que hemos hecho casi sin darnos cuenta aprovechando que íbamos a encender el horno para hacer una pizza.
Se que me he hinchado a poner fotos pero: una imagen vale más que mil palabras.
Un saludo.