Con esta receta te sale un flan para unas 10 o 12 personas siempre y cuando las cantidades sean moderadas, je, je, lo puedes preparar en una flanera grande o en moldes individuales, ahora parece que está muy de modo las dosis individuales y la verdad es que en estas fechas son una alternativa estupenda si no queremos pasarnos con las cantidades.
Ingredientes:
4 huevos
250 ml. de leche condensada
385 ml. de leche evaporada
2 cucharadas soperas de harina fina de maíz (maizena)
500 g. de calabaza
1 pizca de sal
1 cucharadita de canela
Para el caramelo:
5 cucharadas de azúcar blanquilla Amagoldi
1 cucharada de agua
unas gotas de agua
Elaboración:
El puré de calabaza ya lo he preparado en otras recetas, y lo que he hecho es congelar el que me sobra y así tenerlo para momentos en los que desee preparar postres con calabaza. Una forma rápida es colocar la calabaza en trozos en un recipiente apto para el microondas durante unos diez minutos, luego escurrir el exceso de agua que suelta la calabaza y triturar con un tenedor o con la batidora.
Una vez hecho puré la calabaza al perder agua usamos unos 480 g. aproximadamente.
Calentar el horno a 250 ºC con agua en la bandeja ya que el flan lo haremos al baño maría.
Preparar el caramelo líquido colocando en un cazo las gotas de limón, el azúcar y el agua y llevar a ebullición sin remover hasta que el azúcar se disuelva y tome color caramelo. Pasar el caramelo a un molde grande o varios pequeños.
En un bol batir los huevos y luego mezclar el resto de ingredientes.
Verter la mezcla del bol en el molde con cuidado para que el caramelo no se mezcle. Un truco es colocar una cuchara boca abajo y verter la mezcla con cuidado sobre la cuchara.
Colocar el molde en el horno al baño maría durante 45 minutos a 180º C. Una vez pasado el tiempo dejar enfriar sobre una rejilla y luego ponerlo en la nevera un mínimo de 2 horas antes de desmoldarlo.
Estas semanas me tomaré unos días de descanso por el blog ya que en la cocina serán mis días de mayor trabajo y satisfacción.
Deseo de todo corazón que disfrutes con este postre tanto como lo hemos hecho en casa y recuerda ser siempre feliz. ¡Mil besos!