En el caso de que no os guste mucho la mantequilla, absteneros a prepararla, porque a cada bocado notas un intenso sabor a mantequilla que te invade la boca.
A la hora de hornearla, si veis que empieza a dorarse, taparla con un papel de plata.Nos ponemos delantales y ¡ a cocinar!
Ingredientes
150 g de mantequilla ablandada más extra para engrasar.
75 g de azúcar blanquilla más extra para espolvorear.
175 g de harina.
50 g de maicena.
1 molde desmontable redondo de 18 cm.
Preparación
Precalentamos el horno a 160ºC. Engrasamos el molde y lo forramos con papel de horno.
Ponemos en un cuenco grande la mantequilla ablandada y el azúcar.
Batimos con batidora eléctrica hasta lograr una mezcla ligera y esponjosa.
Agregamos lentamente la harina y la maicena y movemos, hasta incorporarlos a la mezcla.
Mezclamos con las manos para formar una masa grumosa. Pasamos al molde.
Presionamos la masa con las manos para formar un bloque compacto y uniforme.
Con un cuchillo afilado marcamos suavemente la mantecada, formando 8 porciones iguales.
Pinchamos la mantecada con un tenedor siguiendo un patrón decorativo.
Cubrimos con plástico adherente y refrigeramos 1 hora.
Horneamos de 30 a 40 minutos, con calor arriba y abajo, a media altura del horno sobre rejilla. Si se dora, cubrimos con papel de aluminio.
Sacamos la mantecada del horno y marcamos de nuevo las porciones con un cuchillo afilado.
Aún caliente, espolvoreamos encima una capa fina de azúcar blanquilla.
Cuando esté bien fría, desmoldamos con cuidado y cortamos en porciones, siguiendo las líneas marcadas.
Nota: La mantecada se conservará 5 días en un recipiente hermético.