Hola, ¿qué tal estáis llevando estos primeros días de calorcito primaveral?
Espero que bien. No sé a vosotros, pero a mí me encanta este tiempo. Las tardes empiezan a ser más largas, empieza a resurgir ese aroma tan característico de nuestra tierra a azahar y vamos dejando a un lado del armario los abrigos para dejar paso a ropa más ligera, fresquita y colorida.
Pero la primavera no solo nos trae cosas bonitas...
Se acerca la fecha de la temida operación biquini, de la que nadie se escapa, hombres, mujeres, jóvenes y no tan jóvenes. A la gran mayoría nos empiezan a dar dolores de cabeza esos kilitos que hemos ido almacenando. Llega la primavera, nos desprendemos de las capas de ropa llevamos en invierno y nos vemos los "miches" que antes no estaban, o eso nos decimos. El verano anterior, la navidad y demás fiestas, nos dejan ese regalito que nos prometemos perder antes de que llegue la primavera o el verano, pero lo que ocurre es que siguen ahí. No se van, por mucho que los miremos con cara de odio. Entonces empezamos a ponernos a dieta, hacer deporte, usar cremas, infusiones, etc.
Todo esto está muy bien siempre que lo hagamos con prudencia, seamos conscientes de que los milagros no existen y no hagamos locuras para perder en pocos días todo lo que creemos que nos sobra. No olvidemos que lo principal es nuestra salud. Y nada de hacer caso a las dietas como las de beber vinagre, sólo líquidos y todas esas que leemos. Os dejo unos ejemplos de lo que NO HAY QUE HACER aquí y aquí. Perder peso es complicado, pero mejor no perder nada que perder la cabeza.
No nos dejemos engañar por las dietas, los medicamentos o cremas milagro que nos venden en la tele de madrugada. Confesadlo, todos tenemos algún "AB Shaper", crema de moldeadora/reductora o cosas así en casa. En todos estos años de operaciones biquini que llevo, he aprendido que la única forma de perder esos kilitos es eso que siempre oímos y que no nos gusta nada.
Comer sano y con moderación. Como decía mi madre lo que no engorda es lo que no te comes y que es mejor terminar la comida con un poquitito de hambre.
Y luego está el ejercicio. Sí, por mucho que duela, sobre todo a mí, el ejercicio es básico si queremos perder algo.
Yo, para intentar mantenerme algo en forma, procuro andar, casi correr, media hora diaria y comer cositas light como os he enseñado en mis recetas, aunque de vez en cuando me cuelo, como también os enseñaré en próximas recetas.
Mi media hora de tortura diaria
Así, como dice la teoría que todos nos sabemos tan bien, comida sana, deporte. Es cierto que hay productos naturales que nos ayudan con la retención de líquidos y con la circulación, pero siempre que sean de un sitio de confianza. Si de verdad tenemos problemas de peso, debemos ponernos siempre en manos de un experto, nada de locuras. Y con un poco de constancia, lo más difícil de todo, para cuando llegue el verano nos podremos poner en bañador sin sentir la necesidad de taparnos con la camiseta.
¿Qué truquitos utilizáis vosotros para perder esos kilitos? ¿Tenéis algún objetivo de cara al verano? ¿Habéis hecho alguna vez una locura de dieta?
Y sobre todo, no os olvideis de disfrutar la primavera.
Besos
Fuente: este post proviene de 50 Crisis, donde puedes consultar el contenido original.
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