Ingredientes:
4 berenjenas.
Tomate frito casero.
3 bolas de queso mozarella fresco.
100 gramos de queso parmesano rallado.
Albahaca fresca.
Orégano.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal.
Elaboración:
Comenzamos cortando en rodajas las berenjenas (no demasiado gruesas), las espolvoreamos con sal gorda y las dejamos en un escurridor durante unos 30 minutos. Transcurrido ese tiempo pasamos nuestras berenjenas por una sartén o plancha bien caliente con un chorrito de aceite y cuando las tenemos todas listas solo nos queda montar nuestro plato.
En una bandeja de horno colocamos una capa de berenjenas a la plancha, sobre ella otra capa de tomate frito casero y, seguidamente, una capa de mozarella fresca. Por último espolvoreamos con el queso parmesano rallado, un poco de orégano y, de forma generosa, hojas de albahaca fresca (esto le dará un toque delicioso). Repetimos la operación hasta obtener unas tres o cuatro capas de berenjena. La última capa debe ser de queso parmesano rallado. Finalmente horneamos a 180 grados unos veinte minutos . Una vez fuera del horno dejamos reposar unos 15 minutos y listo.