Pues bien, además de preparar riquísimos muffins con ellos, ¿sabías que también se pueden utilizar como base para diversas recetas, especialmente entremeses y bocados bastante originales? Te mostramos algunos ejemplos en este post.
En este vídeo nos enseñan a preparar 2 recetas de picoteo usando el molde puesto boca abajo, es decir, usando la base del mismo, no los huecos. Una de ellas son como una especie de mini pizzas con un hueco dentro para echar los ingredientes que se desea; y la otra son unos recipientes-tacos: se da forma a unas tortillas con ayuda de la forma del molde. Si queréis preparar las recetas, los 350 grados Fahrenheit son 170ºC.
En este otro vídeo, además de la idea de los bowl-tacos, se apuntan otros 4 usos más del molde de muffins: para hacer helados; para servir distintas salsas a la vez en una cena o comida de picoteo; para hacer una galleta con un hueco en el centro en el que echar helado y para cocinar huevos en el horno.
Y por último, compartimos el uso del molde de muffins que más nos ha gustado: unos bocaditos de espaguetis, salsa de tomate y albóndigas.
Aunque el vídeo está en inglés, se entiende bastante bien la elaboración: se cuecen unos espaguetis, se escurren, se riegan con aceite de oliva y se dejan enfriar. Luego se echa queso rallado. Se echa en el molde aceite en spray y se coloca en cada hueco un puñado de espaguetis. Sobre estos, una cucharada de salsa de tomate y sobre la salsa, ponemos una albóndiga. Terminamos cubriendo con más salsa de tomate y más queso y horneamos. ¡Mira qué aspecto tan sensacional tienen una vez emplatados!
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Primera imagen: Samdogs/Flickr.com
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