Tapas famosas
La tapa es esa ración/porción/bocado que sirven en los bares españoles para acompañar a la consumición; y tal es su importancia y fama, ya no solo en nuestras fronteras, sino como emblema español en todo el mundo, que incluso tiene su fecha señalada, el 29 de septiembre, jornada en la que se celebra el Día Mundial de la Tapa.
Tapas famosas Para celebrarlo por todo lo alto, hemos hecho memoria y hemos intentado recopilar aquí 20 de las tapas más famosas que se suelen servir en distintos bares de la geografía española. Por supuesto, sabemos que faltan muchas más, porque no hay duda que la gastronomía española es tan rica que las posibilidades de la tapa son infinitas.
a continuación 20 tapas famosas
No hay bar que se precie que no la tenga entre sus tapas. Eso sí, en cada uno, su sabor y su textura son diferentes.
Tapa de jamón
La clave de una buena tapa de este embutido está en que las tapitas sean finas y el jamón sea de la mejor calidad.
Tabla de queso
Con distintas variedades de queso, se componen tablas muy apetecibles. Esta tapa y la de jamón suelen servirse juntas a veces.
Junto con la tortilla de patata, de lo más solicitado en los bares. Y como ocurre con la otra, en este caso, los ingredientes que cada bar añaden a la salsa, le dan a la tapa un toque especial.
También es común en la mayoría de los establecimientos hosteleros. Su formato hace que el pan sea el mejor acompañamiento, aunque en algunas ciudades, se toma servida en una corteza grande de cerdo, llamándose la tapa en este caso Paloma.
Calamares rebozados que se suelen regar con un buen chorreón de limón. Aunque por ser un producto de mar parezca que solo sea una tapa típica de zonas costeras, lo cierto es que en la carta de los bares de interiores no falta.
Aunque probablemente en Galicia es donde se probarán las mejores tapas de pulpo, esta está extendida por toda la geografía española.
De las de pollo, jamón y bacalao, se ha evolucionado a servir croquetas de todos los "colores y sabores".
Generalmente te suelen poner una ración de empanadillas congeladas fritas, pero si consigues un sitio donde te las pongan caseras, es un acierto seguro.
Como en el caso de los calamares a la romana, el hecho de ser un producto de mar, no hace que no sea una tapa que encontramos ya en cualquier bar de cualquier rincón.
Es la tapa más sencilla y que más se sirve. Si son alinás como la de la imagen, la diferencia con las manzanilla de bote es abismal.
Típicos de los bares más tradicionales y no aptos para personas a dieta, puesto que son pedacitos de tocino fritos.
Boquerones en vinagre (con patata frita)
Aunque se pueden servir solos, se vuelven una tapa mucho mejor si van acompañados de patatas fritas y se comen de un bocado, como se muestra en la imagen.
Una de las múltiples formas de presentar las gambas como tapa. Están rebozadas y fritas y, como ya hablamos con el calamar y los chopitos, no son exclusivas de zona de costa.
Una tapa que se consume especialmente en Castilla y León, de curioso nombre, compuesta de patatas, torreznos y pimentón.
La costa andaluza es el origen de esta tapa de pescado y, aunque está extendida en más zonas españolas, los bares de la costa sur son las que más la sirven.
Junto con los mejillones a la vinagreta, estos son los reyes de la carta. El secreto de estos mejillones es que llevan bechamel y, además, están empanados.
Una tapa que tiene igual de amantes que de detractores, puesto que su textura gelatinosa no gusta a todos por igual.
Un plato emblema de la cocina canaria, donde sin duda se probarán los mejores mojos. Pero ya se pueden encontrar en muchas cartas de bares de toda España.
Un buen trozo de pan no puede faltar para degustar esta tapa a la que, además, se le pueden añadir unos piñones.
