Aunque muchas personas lo desconocen, en la tierra por excelencia de la horchata de chufa el consumo de ésta apenas se concibe si no va acompañada de unos dulces que reciben el nombre de fartons. Se trata de unos bizcochos alargados y finos, de textura blanda y recubiertos de azúcar que hacen aún más irresistible el consumo de esta bebida estival.
El origen de estos dulces se encuentra en Alboraya, un municipio de la provincia de Valencia, situado en plena zona de las mejores huertas de esta tierra y lugar de nacimiento, también, de la horchata. Todos los que conocen este pueblo recomiendan no dejar de probar en sus horchaterías artesanales la bebida de chufas acompañada de los auténticos y genuinos fartons.
Para mojar
En la década de los 60, en Alboraya, la familia Polo, que tenía un horno en la plaza del pueblo, decidió elaborar un dulce pensado para acompañar a la horchata, ya de gran popularidad en la Comunidad Valenciana por aquél entonces. De esta manera, "se creó una masa especial para mojar en ella", nos comentan los expertos de Fartons Polo.
De la mezcla de ingredientes naturales como son la harina de trigo, el azúcar, el aceite de girasol, el agua, los huevos, la levadura, la sal y la harina de soja surgieron los fartons, que pronto adquirieron popularidad no sólo en Alboraya, sino en todos los pueblos de Valencia. Aunque surgieron para ser consumidos con la horchata, los expertos nos comentan que "son también deliciosos con chocolate a la taza e incluso con leche fría".
La receta
Preparar estos bollos en casa es sencillo y rápido si sigues los pasos que los artesanos de Fartons Polo apuntan:
1.- Utilizando como medida un vaso, ponemos esa cantidad de cada uno de estos ingredientes en un bol: huevo, aceite, azúcar y agua. Agregamos un poco de levadura de cerveza.
2.-Añadimos, poco a poco, la cantidad de harina que admitan los ingredientes hasta que obtengamos una masa blanda que dejaremos reposar unos minutos.
3.- Una vez pasado el tiempo de reposo, troceamos la masa y extendemos los pedazos obtenidos dándoles la forma alargada y fina que poseen estos dulces. Luego, los dejamos fermentar.
4.-Terminada la fermentación, los cocemos en el horno a 185º C durante 12 minutos.
5.- Por último, extraemos y, aún calientes, los bañamos en azúcar.
Disfrutar aún más de la horchata es posible si en ella mojas estas delicias de textura blanda. Si viajas a Valencia no dejes de probar los artesanos que podrás encontrar en muchas confiterías y heladerías. Pero también los puedes adquirir ya en algunos supermercados o, si lo prefieres, sigue los pasos facilitados y prepáralos con tus propias manos. Con ellos, seguro que sorprendes a todos los que vayan a merendar a tu casa.