Con lo que me gustan a mi las galletas, tanto hacerlas como comérmelas, no podían faltar propuestas en forma de galleta para hacer esta Navidad. Y no solo por lo ricas que están, si no que además las puedes hacer para regalárselas alguien especial, como ha sido el caso de estas galletas que veis, que se las llevó Javier mi hijo pequeño al cole, para regalárselas a todos sus compañeros de clase.
El papel de azúcar para decorar galletas o tartas es otro descubrimiento además del chocotransfer del que ya sabéis mi afición. A diferencia del chocotransfer sin embargo, no requiere más que recortarlo, aunque hay lugares donde te lo venden incluso pre cortado, y pegarlo con un poco de sirope de maíz directamente sobre la galleta. Si no quisieras comprar un bote entero de sirope, también puedes pegarlo con un poco de miel o incluso con mantequilla pero esta última opción solamente si fueras a consumir las galletas inmediatamente ya que la mantequilla necesita frío para su conservación.
Puedes utilizar la receta de galletas que más te guste y puedes ponerle una lámina de fondant como he hecho yo, pero también puedes pegar la lámina de papel de azúcar directamente sobre la galleta y queda también muy bonita.
INGREDIENTES:
Para las galletas:
250 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
250 gr. de azúcar glas
1 huevo mediano y una yema a temperatura ambiente
650 gr. de harina tamizada
1 cucharadita de esencia de vainilla (o de lo que más te guste a ti)
Dos o tres cucharaditas de leche para ligar la masa
Para la decoración:
Papel de azúcar (yo lo compré aquí)
Sirope de maíz o miel
Fondant (opcional)
ELABORACIÓN:
De las galletas:
Batir la mantequilla con la pala a velocidad 3 durante aproximadamente 2 minutos. Parar la máquina y bajar lo que haya quedado en las paredes.
Bajar la velocidad al 1 e ir añadiendo el azúcar a cucharadas.
Volver a parar la máquina, bajar de nuevo todo lo que haya quedado pegado en las paredes y añadir la esencia que hayamos elegido y el huevo con la yema ligeramente batido muy poco a poco y a velocidad 1. El huevo tiene que estar totalmente integrado antes de empezar a echar la harina.
Después de parar la máquina y bajar de nuevo todo lo que nos haya quedado en las paredes, comenzaremos a añadir la harina a cucharadas, una a una, de la misma manera que hicimos con el azúcar. Cuando hayamos terminado de echar toda la harina, añadiremos dos cucharadas de leche para ayudar a la masa a que se forme una bola, ya que en este momento estará desmigada, pero veréis como con un poquito de leche, conseguimos que se forme la masa que más tarde estiraremos. En caso de no conseguir que la masa se haya despegado completamente de las paredes y forme la bola que os digo, añadiremos otra cucharada de leche más.
En este momento, colocamos la masa sobre un papel de hornear y le damos una forma rectangular. La aplastamos un poco con las manos y la cortamos en cuatro. Ponemos cada cuarto entre dos papeles de hornear y los estiramos con el rodillo, si es de los que tienen anillas a los lados mejor, ya que así todas las galletas salen del mismo grosor.
Ponemos las cuatro planchas sobre una bandeja plana y la metemos en la nevera durante aproximadamente tres horas. Yo siempre la dejo un día porque cuando me propongo decorar galletas, no lo hago todo el mismo día, un día hago la masa, otro día corto y horneo las galletas y las guardo en una caja de metal y normalmente el fin de semana es cuando las decoro.
Precalentamos el horno a 180º C , arriba y abajo. Antes de cortar la masa con los cortadores, pasar el rodillo de nuevo para alisar las posibles imperfecciones que pueda tener la masa, sobretodo los lados, que a veces se dobla un poco alguna esquinita. Retiramos el papel de arriba y pasamos a cortar, vamos poniendo directamente las galletas en la bandeja que vamos a utilizar para hornearlas y una vez cortadas, metemos la bandeja en la nevera durante aproximadamente 10 minutos para que no pierdan la forma . La masa restante, la volvemos a estirar y la metemos en la nevera tal y como hicimos al principio y la estiraremos solo dos veces más porque de lo contrario, perderían la consistencia y no quedarían tan lisitas, que para decorarlas después es un engorro. Yo con lo que sobra después de estirar la masa tres veces, suelo hacer tres o cuatro galletas con sellos de esos de caritas y se las doy a los niños en cuanto se enfrían, les encanta.
Pasados los 10 minutos metemos las galletas en el horno durante aproximadamente 13 minutos o 15 dependiendo del tamaño de la galleta. Conviene poner siempre las del mismo tamaño porque no se hacen en el mismo tiempo las grandes que las pequeñas. Así que después de 13 minutos estaremos muy pendientes ya que un minuto más, puede hacer que las galletas se nos tuesten más de lo deseado, y aunque no se quemen, a mi personalmente no me gusta nada como quedan las galletas decoradas cuando están demasiado tostadas. Sabremos que la galleta está lista cuando empieza a coger color por los lados. Yo os recomiendo siempre poner un temporizador que te avise para que ninguna distracción nos haga estar pendientes a partir de esos 13 minutos. En ese momento sacamos la bandeja del horno y las dejamos cinco minutos antes de pasarlas a la rejilla para que se enfríen, ya que nada más sacarlas del horno, están aún blanditas y se podrían romper al manipularlas. Pasados los cinco minutos, ya verás como están totalmente firmes y las puedes pasar a la rejilla con la pala especial para galletas.
Decoración de las galletas:
Si fuésemos a utilizar fondant, lo estiramos con ayuda de un rodillo y cuando obtengamos el grosor deseado, lo cortaremos con el mismo cortador que utilizamos para darle forma a las galletas. Pegamos el fondant a la galleta humedeciéndolo ligeramente con agua y con ayuda de un pincel.
Ahora vamos a pegar nuestra imagen de papel de azúcar sobre la galleta directamente o sobre el fondant, en el caso de haber elegido esta opción. Para ello y con ayuda de otro pincel, untamos ligeramente con sirope de maíz el revés del papel de azúcar que vayamos a utilizar y lo pegamos a la galleta o al fondant que pusimos previamente.
Ya tienes listas tus galletas navideñas en dos sencillísimos pasos.
ALGUNAS ACLARACIONES:
Para conservar las galletas en perfecto estado, guárdalas en un bote hermético preferiblemente metálico