Hoy os traigo una idea supersencilla para Halloween. La podéis hacer con los niños, ya que simplemente se trata de ponerle un palito a las galletas oreo, bañarlas en chocolate y decorarlas.
Las he hecho en un par de ocasiones y os recomiendo que uséis las galletas oreo doble crema porque el palito se "pega" mejor en la crema, aunque luego le pongáis un poco más de chocolate. De todas formas las otras también sirven.
Para la decoración he usado un poco de fondant, pero se puede sustituir por chocolate negro o alguna chuche.
Esta es una versión mucho más fácil de los famosos cake pops, te ahorras hacer las bolitas y os aseguro que son un éxito, a los niños
les chiflan.
Vamos con la receta.
Es importante que los palitos queden bien pegados a la galleta. Separar las dos mitades, pegar el palito sobre la crema (en las galletas doble crema queda mejor porque puedes hundir el palo en la crema),poner chocolate blanco sobre el palo y un poco en la otra parte de la galleta. Tapar e introducir en la nevera.
El chocolate para bañar las galletas se puede fundir en el microondas o al baño maría, siempre con mucho cuidado de que no se queme.
Fácil verdad?
Y lo guapos que estánnn!!
Solo falta el bocado...uhmmmmm
Con esta receta participo en el "Concurso Primer Aniversario del blog Pal vientre, todo lo que entre", organizado por Leticia.