Para la masa:
250 gr de harina sin gluten Mix Pan - Mix B
125 gr de mantequilla sin sal
1 yema de huevo
50 ml de agua fría
Una pizca de sal
Para el relleno:
1 rulo de queso de cabra
2 cebollas medianas cortadas en juliana
1 huevo
200 ml de nata (crema de leche) para cocinar
1 cucharadita de azúcar
sal y pimienta
Romero fresco para decorar
Lo primero es preparar la masa quebrada, para ello he usando un robot de cocina con gancho. Tamizamos la harina y añadimos la mantequilla a trocitos. Mezclamos a velocidad lenta hasta obtener una especie de "arenado". Añadimos la yema, el agua y la sal, amasamos hasta conseguir una masa homogénea. Hacemos una bola, la envolvemos en papel film, la dejamos media hora en la nevera reposar.
Precalentamos el horno a 200ºC calor arriba y abajo.
Pasado ese tiempo , estiramos la masa entre dos papeles de hornear y forramos el molde elegido (podeis engrasar el molde o bien dejar el papel de hornear debajo , esta opción es la que más me gusta, ya que os resultara muy facil colocar la masa en el molde) . Horneamos la masa 10 minutos. La sacamos y reservamos.
En una sartén con un chorrito de aceite, rehogamos la cebolla cortada en rodajas. Cuando la cebolla este pochada, añadimos una cucharadita de azúcar y rehogamos unos 5 minutos más.
En un bol batimos el huevo junto con la nata (crema de leche) y la sal.
Añadimos la cebolla sobre la masa quebrada, añadimos la mezcla de huevo y nata (crema de leche). Decoramos con las rodajas de queso de cabra y repartimos ramilletes pequeños de romero.
Horneamos a 180ª durante 20 minutos aproximadamente.