PASTELES DE LIMÓN (Limoncillos)





Hola a tod@s!! A mí me encanta el limón, vamos, que soy de las que se lo come tal cual. Pero he descubierto que no solo a mi, a muuuucha gente, porque los pastelitos han volado!! Y eso que hice unos cuantos, en casa, en el trabajo, a todo el mundo les ha gustado mucho. Estoy escribiendo y salivando a la vez al recordar el sabor de estos limoncitos (tacho el nombre porque por lo visto, a alguien se le ocurrió patentar el nombre de un bizcocho que se ha hecho toda la vida, allá cada cual). Pues eso, que he hecho estos Limoncillos, limoncetes, limonillos, o hasta linfocitos si tu quieres.

Para ello, he seguido la receta de Cuuking, que está deliciosa!!! Aunque yo le puse algo más de limón y separé claras y yemas, pero es básicamente igual. Salen unos pastelitos muy ligeros, con un gran sabor a limón y que están para empezar a comer y no parar.

INGREDIENTES:

Para la masa:

- 3 huevos
- 170 g de harina
-150 g de azúcar
- Ralladura de un limón y de una lima
- 60 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 40 g de nata (crema de leche) líquida
- 15 cucharadita de levadura química.

Para el glaseado:

- El zumo de un limón
- 100 g de azúcar glass

ELABORACIÓN:

Lo primero que vamos a hacer es encender el horno a 180°.

Mientras vamos preparando la masa, que se hace en un plís plás. Cogemos primero la mantequilla, que debe estar a temperatura ambiente y la batimos con el azúcar, la ralladura de limón y de lima y las yemas de los huevos hasta que se integren bien.

Añadimos la nata (crema de leche) y el zumo de limón, removemos y vamos echando la harina junto a la levadura, tamizadas previamente para airearla y que no formen grumos. Se mezcla justo hasta que se integre.

Ahora, lo único que tenemos que hacer es batir las claras de huevo a punto de nieve y una vez que estén, se incorporan a la mezcla anterior, y con una espátula y movimientos envolventes lo vamos integrando todo.

Llenamos unos moldes de magdalenas unos 2/3 más o menos y metemos en el horno, unos 20/25 minutos. Tenemos que tener en cuenta que no se nos doren mucho. Son pastelitos muy ligeros y quedan mejor blanquitos. Pincha con un palito y si ves que no sale manchado de masa es que ya están.

Dejamos enfriar (si puedes aguantar la tentación) y preparamos el glaseado.

Hacer el glaseado es muuy fácil. He puesto unas cantidades, pero la verdad es que yo lo hago más o menos a ojo. Primero pongo el zumo de limón, y luego, voy echando el azúcar glass poco a poco, removiendo con energía hasta que el glaseado esté a tu gusto. Puedes ir variando las cantidades, tanto de limón como de azúcar, lo más divertido es ir probando jajaja.

Ya sólo nos queda poner el glaseado encima de los pastelitos y a comer!!! Que ricos y esponjosos están, no dejéis de probarlos!!

ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO!!! UN BESO!!!

Fuente: este post proviene de Tartis y Más, donde puedes consultar el contenido original.
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