Esta receta está inspirada en la famosísima red velvet cake (ver receta), pero es más sencilla y se prepara en pequeños bocados. Por su vistosidad y presentación es ideal para los más pequeños, de esta forma podremos ofrecerles un desayuno o merienda llamativo a la par de sano.
Ingredientes:
125 gr. de mantequilla sin sal en pomada.
160 gr. de azúcar moreno
200 gr. harina de repostería.
1 y 1/2 cucaharadita de levadura en polvo.
4 huevos medianos.
Una pizca de sal.
25 ml. de buitre cream (ver como prepararlo de forma casera)
3 cucharaditas de esencia de vainilla.
1 cucharadita colorante rojo.
Zumo de un limón.
1 yogur natural sin azúcar.
Preparación:
Precalentamos el horno a 180º.
Separamos las claras de las yemas.
Montamos las claras a punto de nieve, añadiendo una pizca de sal.
Mezclamos el azúcar con la mantequilla hasta obtener una mezcla homogénea y esponjosa.
Incorporamos las yemas una a una con movimiento envolventes.
Echamos el yogur natural, la esencia de vainilla y el butter cream. Mezclamos bien.
Añadimos las claras montadas con cuidado e intentando evitar que pierdan aire.
Tamizamos el harina y mezclamos con la levadura.
Añadimos el harina y la levadura.
Finalmente incorporamos el colorante rojo y mezclamos bien.
Engrasamos los moldes pequeños y echamos la mezcla.
Horneamos unos 15-20 minutos a 180º.
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