Tengo que reconocer que este año me he pasado con los postres navideños.
Seguro que lo habréis notado jajajaja. Normalmente equilibro las entradas navideñas para que tengáis en el blog tanto recetas dulces como saladas, pero no sé que ha pasado este año que me he pasado con los dulces jejeje
El caso es que suelo publicar recetas dulces y saladas en la misma proporción, pero este año las saladas que he publicado no son todas especiales para estas fechas.
De todas maneras, en el blog tenéis recetas de otros años que os pueden servir.
Hoy os traigo una receta salada que os va a servir tanto para un día especial como para una comida familiar. Y como aún quedan días de festejos, igual os resulta útil.
INGREDIENTES:
Un solomillo de unos 600 gr abierto en libro
6 u 8 lonchas finas de jamón cocido
6 u 8 lonchas finas de jamón serrano
200 gr de espinacas frescas
100 gr de requesón
50 gr de piñones
25 gr de pasas sin hueso
sal y pimienta para sazonar
1 vaso de vino blanco
1/2 vaso de agua
1 pastilla de caldo de carne
2 zanahorias
1 cebolla
2 pimientos verdes
1 trozo de pimiento roj
7 u 8 dientes de ajo
PREPARACIÓN:
Comenzamos preparando el relleno. En una sartén con un poco de aceite picamos un par de dientes de ajo y los doramos. Añadimos las espinacas, sazonamos con sal y pimienta y las salteamos. Cuando estén hechas, veréis que se han reducido considerablemente, agregamos los piñones y damos unas vueltas.
Dejamos que se enfríe un poco antes de mezclarlo con el requesón y hacer una pasta.
El solomillo lo tendremos abierto en forma de libro. Esto es mejor que os lo haga el carnicero cuando compréis la carne, se quedará abierto en una pieza.
Sazonamos por las dos caras con sal y pimienta. Ponemos las lonchas de jamó cocido en el centro, encima las de jamón serrano. Untamos la pasta de espinacas y requesón y colocamos las pasas encima.
Enrollamos la carne y la metemos en una redecilla. Vamos a dorarla en la sartén con aceite para sellar y que se queden los jugos dentro.
Una vez dorada la carne la pondremos en una fuente de horno. Alrededor vamos a colocar las zanahorias en rodajas,los ajos con piel, los pimientos en tiras y la cebolla también. Como la cebolla tarda menos en hacerse, intentaremos que el resto de las verduras la "tapen" para que no se queme mucho.
Echamos por encima el vaso de vino y el de agua. Espolvoreamos la pastilla de caldo y metemos en el horno a 180º durante unos 30 o 35 minutos. A mitad de cocción, regamos con el caldo que se genera y podemos darle la vuelta también.
Pasado el tiempo, pinchamos la carne con una brocheta y si notamos que entra con facilidad es que está lista. Pero si vemos que la carne ofrece cierta "resistencia" la dejamos un poco más en el horno.
Una vez acabada la cocción, cogeremos parte de las verduras y un par de dientes de ajo (no todos si no picaría mucho) y lo trituramos hasta tener una salsa.
Dejamos que la carne se enfríe para poder cortarla bien. Esta carne se puede hacer de un día para otro y congela muy bien, por lo que es perfecta para hacer con antelación.
Doramos un par de dientes de ajo.
Añadimos las espinacas, sazonamos y las salteamos.
Añadimos los piñones y damos unas vueltas.
Dejamos enfriar y mezclamos con el requesón.
Preparamos la carne y sazonamos por los dos lados.
Ponemos las lonchas de jamón cocido en el centro.
Y las de jamón serrano encima.
Ponemos la pasta de requesón y espinacas y las pasas.
Enrollamos el solomillo y lo metemos en una redecilla.
Doramos en la sartén.
Y colocamos en una fuente de horno con los ingredientes de la salsa. Cocinamos unos 35 minutos
Acabado el horneado sacamos parte de las verduras y las trituramos.
Y cuando la carne esté fría la podremos cortar en rodajas
Y servimos con las verduritas y la salsa que salió de triturarlas.
Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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