Esta es una de las tartas más conocidas de la gastronomía española. Originaria de la cocina gallega, su fama ha traspasado fronteras. Tan reconocida por cocineros y gastrónomos que la receta está publicada en el BOE,
Es una receta sencilla para la que no se precisa aparatos especiales ni ingredientes difíciles de conseguir. Aunque yo debo deciros que en esta receta empleé azúcar de abedul en lugar de azúcar blanca para que pudieran probarla unas amigas mías que no pueden tomar azúcar refinada. Pero como las equivalencias son las mismas tanto para una como para la otra podéis hacerla tranquilamente con el azúcar que más os guste.
INGREDIENTES:
250 gr de almendra molida
200 gr de azúcar
1 cucharada de canela
Ralladura de limón
5 huevos
2 cucharadas soperas de azúcar glass para espolvorear
PREPARACIÓN:
En un bol grande ponemos la almendra molida, el azúcar, la canela y la ralladura de limón. Lo mezclamos todo con una cuchara de madera y agregamos los huevos uno a uno hasta que estén todos bien integrados. Podemos ayudarnos con la batidora eléctrica.
Vertemos la mezcla en un molde desmoldable al que le pondremos papel de horno en el fondo. Horneamos unos 35 o 40 minutos , con calor arriba y abajo a 175º. Pinchamos con un palillo y si sale seco está lista.
Dejamos enfriar y espolvoreamos azúcar glass por la superficie a través de un colador. Si queremos poner una plantilla de papel con la cruz de Santiago, espolvoreamos el azúcar por encima y la levantamos con cuidado la cruz.
Os dejo el dibujo de la cruz de Santiago imprescindible para que tenga la auténtica imagen de la Tarta de Santiago.
En un bol grande mezclamos con una tenedor la almendra molida, azúcar, canela y ralladura de limón.
Vamos añadiendo los huevos uno a uno, batiendo bien y sin añadir el siguiente hasta que no estén bien integrados.
La mezcla que es muy pastosa la vertemos en un molde redondo y engrasado. Horneamos hasta que esté doradita. Ya en frío, colocamos la cruz y espolvoreamos azúcar glass.
Una receta estupenda, riquisima, apta para celíacos.
Es dulce, suave, jugosa y muy fácil de hacer. ¿Vas a probar a hacerla?
Y con esta receta que publico hoy 25 de diciembre quiero desearos toda la felicidad del mundo. Que en estos días tan especiales, de reuniones familiares y de comilonas disfrutéis preparando con amor vuestros mejores platos, y si esos platos son de mi blog, mucho mejor jejeje
Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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