Ingredientes:
8 filetes de lomo de cerdo (hemos utilizado pluma ibérica)
1/2 manojo de espárragos trigueros
1/2 cebolla
1 cucharadita de harina de trigo
3 cucharadas soperas de salsa de soja
100ml de caldo caliente
1 cucharadita de estragón en polvo
Sal
Pimienta negra
Aceite de oliva
Preparación:
Empezaremos la receta lavando y troceando los espárragos. Desecharemos las partes más duras y los pondremos a cocer. Para ello, pondremos una cazuela al fuego con agua y sal y cuando comience a hervir el agua, añadiremos los espárragos y los dejaremos cocer, hasta que estén tiernos (aproximadamente tardaremos 10 minutos).
Pasados estos 10 minutos, los retiraremos y reservaremos.
Mientras se van cociendo los espárragos, iremos preparando el lomo y la salsa.
Para empezar su preparación, pelaremos y rallaremos la cebolla y la reservaremos.
A continuación, salpimentaremos los filetes de lomo y pondremos una sartén al fuego, con un chorrito de aceite. Cuando esté bien caliente, añadiremos los filetes y los doraremos por ambos lados y los reservaremos.
En la misma sartén, empezaremos a preparar la salsa, en el caso de que fuera necesario, incorporaremos más aceite, añadiremos la cebolla y la dejaremos pochar durante unos minutos.
A continuación, incorporaremos la harina y la removeremos bien para que se integre a la cebolla.
Agregaremos la salsa de soja, el caldo y el estragón, removeremos bien y dejaremos que reduzca la salsa a nuestro gusto.
En el caso, que nos guste, con un sabor más intenso, añadiremos más salsa de soja o caldo, en el caso que se espese demasiado.
Al terminar, podemos servir la salsa por encima de los filetes y los espárragos o añadir los filetes y los espárragos a la salsa, removemos un poco para que se integren los sabores.
Ahora, ya lo tendremos preparado para degustar y disfrutar.
Buen provecho.
Propiedades de la soja
La soja verde, o también conocida con otro nombre; como: judía mungo, es uno de los alimentos más valiosos.
Esta legumbre, es muy rica en proteínas, y perfecta para preparar platos sabrosos y muy sencillos.
Una de sus principales propiedades, es el gran aporte de: proteínas, minerales y numerosas vitaminas que ayudan a nutrir nuestro organismo.
Tienen un sabor dulce, son blandos y se digieren con facilidad.
Podemos usarlos, tanto en preparaciones de guisos, como ensaladas, etc.
No obstante, tras la llegada de la soja verde, a China, se descubrió que haciéndolas germinar, se convertían en un delicioso y crujiente ingrediente, perfecto para incorporar en cualquier tipo de preparación; ya que, puede consumirse: crudo, cocido o frito.
Debido a su gran contenido en proteínas, nos proporciona: hidratos de carbono; fibra y una cantidad muy reducida de grasas.
Beneficios de la soja para nuestra salud
Esta legumbre, es rica en: magnesio; también aporta importantes dosis de: hierro; fósforo, que nutre los huesos e interviene en la producción de energía.
Constituyen el tipo de azúcares complejos, que proporcionan un combustible de energía de calidad, para las actividades cotidianas y previenen la resistencia insulínica; por lo que, son perfectos para evitar la diabetes, la obesidad y los altibajos de ánimo.
Aportan cantidades importantes de ácido fólico; así como, numerosas vitaminas, B1, B3 y B6; que permiten asimilar mejor los hidratos de carbono; así como también, nos benefician de vitamina K y nutrientes antioxidantes, como vitamina E, y betacarotenos.
También, contiene una gran cantidad de fibra, por lo que es indispensable añadir este alimento a nuestra dieta, para regular la velocidad del tránsito intestinal y mantener la flora bacteriana de nuestro intestino sana; ya que, tienen mucha importancia en la asimilación de nutrientes.
Sabiendo lo que anteriormente hemos comentado, a continuación, vamos a explicar los principales beneficios, que obtendremos con la ingesta de este alimento.
Son especialmente importantes en las etapas de crecimiento o para aquellas personas que realizan mucho esfuerzo físico, debido a la abundancia de proteínas, energía y micronutrientes.
Aportan dosis de tres minerales esenciales para el desarrollo y la regeneración constante de nuestros huesos: calcio, magnesio y fósforo.
Como ves, esta legumbre nos aporta muchísimas propiedades a nuestro organismo, y en muchas ocasiones, no la tenemos en cuenta en nuestra dieta diaria.
Os aconsejamos que poco a poco, vayáis incorporándola, para que así, os podáis beneficiar de todas sus propiedades.
Fuente: este post proviene de La maleta de Maggie, donde puedes consultar el contenido original.
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