Es verdad que os tengo un poco abandonados, pero me lo sabréis perdonar, por que como muchos ya conocéis estoy inmerso en un proyecto laboral nuevo que me lleva casi todas las energías y eso es bueno, ya que si uno no le pone ganas a las cosas nuevas...
Para compensar os traigo uno de esos postres-desayunos que siempre siempre triunfan. Un exquisito plum cake estilo inglés, pero con dos toques distintos, papaya escarchada y ron (es que si no le pongo alcohol yo....jiajajajajaj).
Este típico bizcocho inglés, se suele tomar a la hora del té o con el desayuno, pero sinceramente a mi me gusta a cualquier hora y generalmente sólo. Es un bizcocho muy tierno y denso a la vez y lleno de sabor, que espero que os guste tanto como a mi.
- INGREDIENTES:
200 gr de harina
75 gr de azúcar
15 gr de levadura en polvo
200 gr de mantequilla
1 chupito de ron
75 gr de papaya escarchada
4 huevos
1 pizca de sal
- ELABORACIÓN:
Encendemos el horno a 180º C.
Comenzamos separando las claras de las yemas.
Derretimos la mantequilla en el microondas.
Montamos las claras con media cucharada de azúcar hasta que estén a punto de nieve. Reservamos en un lugar fresco.
Batimos la mantequilla con el azúcar restante y las yemas de huevo. A ritmo fuerte durante un par de minutos, hasta que casi doblen su volumen. Añadimos el chupito de ron y batimos un poco más.
Mezclamos la levadura con la harina y el punto de sal y lo tamizamos todo, para que no haya luego grumos en la masa. Mezclamos en tres tandas esta harina ya tamizada con las yemas batidas. No incorporamos la siguiente harina hasta que esté la anterior bien mezclada.
Enharinamos los trozos de papaya escarchada para que no se vayan al fondo del pastel a la hora de hornear y las añadimos a la masa. Mezclamos con una espátula y con cuidado.
Pasamos la masa a un molde alargado. Yo uso uno de silicona, pero si queréis utilizar uno metálico, debemos engrasar ligeramente el fondo y los bordes antes de añadir la masa.
Metemos en el horno ya caliente y dejamos que se haga tranquilamente durante al menos 35-40 minutos. Podemos comprobar si ya está, introduciendo un palillo o un cuchillo y este sale limpio.
Sacamos del horno y dejamos enfriar al menos 10 minutos antes de desmoldar. Dejamos enfriar del todo y espolvoreamos con azúcar glass. Cortamos en rebanadas y disfrutamos.
- MARIDAJE:
Un té suave y no muy fuerte potenciará los toques de ron y papaya.
- COSTE: barato.
- DIFICULTAD: fácil.
- TIEMPO: 1 hora.
- CALÓRICO: aunque lleva muy poco azúcar, es un postre, pero como ya ha acabado el veranito y las carnes van tapadas... DATE EL GUSTAZOOOO!
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