Hace unos días quedé con mis amigas Elena y Susana para ir a un concierto. Al acabar, Elena había reservado mesa en un mesón del centro de Málaga, el Mesón Mariano, un sitio de cocina malagueña con unos platos exquisitos.
La especialidad de este restaurante son las alcachofas y el bacalao, pero todo lo que pedimos estaba de lujo.
Le hice fotos a todos los platos porque de esa cena maravillosa yo tenía que sacar algún provecho para el blog. Y con esa pretensión hice estas alcachofas a la montillana, que si bien no es un plato típico de Málaga (mas bien de Córdoba), estaba tan bueno que ha sido el primero que he hecho. Pero vendrán más...
No voy a decir que me haya salido exactamente igual que el del Mesón Mariano, porque la receta no me la dieron, pero están muy buenas y seguro que os van a gustar.
INGREDIENTES:
1 Kg de alcachofas
1 cebolla
2 dientes de ajo
1/2 vaso de agua
1 vaso de vino de Montilla (de ahí el nombre)
aceite, sal y pimienta
100 gr de taquitos de jamón serrano
PREPARACIÓN:
Primero hay que cocer las alcachofas. A mi esta tarea me resulta muy tediosa, sobre todo lo de quitar las hojas duras externas, porque mientras estoy limpiando una alcachofa las demás se empiezan a oxidar aunque las ponga en agua con limón. Así que en esta ocasión he probado a hacerlo de otra manera y no me ha ido mal. Vamos a dejarles el tallo, pero lo pelaremos con un pelaverduras.
A continuación, dejamos las alcachofas tal cual y ponemos una olla grande (yo he usado la olla rápida), con abundante agua. Introducimos las alcachofas en la olla y cerramos. Si usáis una olla rápida las coceremos cinco minutos a partir de que la válvula suba. Si las cocemos en una olla normal, las tendremos unos 15 minutos.
Al acabar la cocción, con cuidado escurrimos el agua y esperamos que las alcachofas estén tibias, entonces podremos quitarles todas las hojas duras y externas con mucha facilidad.
Mientras las alcachofas se enfrían, ponemos un fondo de aceite en una cazuela baja y grande y doramos los ajos picados.Añadimos la cebolla y sofreímos.
Cuando la cebolla esté transparente añadimos las alcachofas ya peladas, las salpimentamos y agregamos el agua y el vino. Dejamos que se vaya haciendo y que el vino se evapore un poco antes de añadir los taquitos de jamón. Removemos la cazuela sin tocar las alcachofas que estarán muy tiernas y se pueden deshacer.
Pelamos los tallos de las alcachofas
Y las ponemos a cocer en una olla con abundante agua
Cuando las alcachofas estén tibias o frías las podremos pelar con facilidad.
Mientras se enfrían, doramos unos ajos.
Y pochamos la cebolla.
Agregamos las alcachofas, salpimentamos y añadimos el vino y el agua. Dejamos que cuezan un rato sin tocarlas.
Cuando ya lleven un ratito cociendo, añadimos el jamón y dejamos unos cinco minutos.
Un plato muy sencillo pero delicioso. Probadlo.