Las alcachofas me apasionan. Hasta la planta me encanta. Es una pena que se tenga que desperdiciar tanto producto para llegar a la parte buena, pero como todo aquello que valga la pena hay que escarbar para encontrar el gran tesoro en su interior. Esta receta de Alcachofas a la Montillana te transporta, te hace levitar de lo buena que está. Son de esas recetas de toda la vida, sencillas, fáciles, con productos de temporada que hacían nuestras abuelas y que sería una lástima que se perdieran.
Me ha dado últimamente por hacer esos platos con historia, con ese regustillo a antiguo pero que no dejan de tener su encanto.
En Suiza es complicado encontrar alcachofas de las buenas, son gigantes, llenas de pelos y con un corazón muy correoso, y encima cuestan un pastón. Así que lo que hago es comprarlas cuando bajo a casa o voy a Italia , las preparo, las limpio, las blanqueo tres minutos en agua hirviendo, las retiro en agua helada, las seco bien y las congelo. Por cuatro duros tengo un arsenal de alcachofas en mi arcón preparadas para cuando me entra el antojo. Para un arroz, para un plato de pasta, fritas, guisadas, al horno para ir rechupeteando las hojas mojadas en cualquier salsa...creo que son buenas de cualquier forma.
Estas alcachofas a la montillana es la simplicidad personificada, cuatro ingredientes de calidad y tenemos un plato perfecto para saborear estas alcachofas en estado puro.
El dicho de menos es más, con este plato se cumple a la perfección. Siempre he pensado que meter muchos ingredientes enmascara los sabores. En mi despensa siempre tengo una botella de Montilla- Moriles, me trae recuerdos de mis viajes a esa Andalucía que tanto me gusta.
Nos ponemos en modo cocinar? Pues venga, poneros unos guantes para que luego no os queden las manos negras por las alcachofas y a cocinar!.
INGREDIENTES
* 2kg alcachofas
* perejil
* 2 cebollas grandes
* 1 puerro
* 4 dientes de ajo
* 1 copa de vino Montilla- Moriles
* azafrán en hebra
* 1 cucharada de harina
* 200ml caldo de jamón
* 150g jamón ibérico en tacos
* sal, pimienta recién molida
* aceite de oliva virgen extra
ELABORACIÓN
1. Preparar un bol grande con agua y ramas de perejil fresco. Reservar.
Ir limpiando las alcachofas eliminando buena parte de las hojas exteriores hasta llegar al centro, cortar el extremo de las hojas, quedándonos con el corazón. Cortar en cuartos y dejarlas en el bol con agua y perejil hasta el momento de cocinar ( de esta forma no se oxidan ).
2. Poner a cocer las alcachofas en agua hirviendo con sal hasta que estén tiernas. Retirarlas y dejar escurrir sobre papel absorbente. Reservar.
3. En una cazuela baja y ancha pochar la cebolla, el puerro y el ajo picado en brunoise . Salpimentar al gusto ( tener en cuenta que lleva jamón y puede quedar excesivamente salado). Cuando estén con un bonito color dorado incorporar los tacos de jamón, dar dos vueltas, unir las hebras de azafrán, dejar dorar levemente e incorporar la cucharada rasa de harina. Remover bien para que se tueste bien la harina e incorporar las alcachofas ya cocinadas. Unir el vino, mover bien, dejar evaporar el alcohol e incorporar el caldo de jamón. Dejar cocinar unos 5 minutos. Rectificar de sal y pimienta. Servir con perejil picado.
Si os gusta más caldoso incorporar más caldo. A mí me gusta estilo salsa.
Es fácil verdad?. Si resulta que debido al olor que desprende aparece el amigo de turno o el vecino del cuarto a comer, incorporáis unas patatas y unos huevos escalfados y alargáis el guiso. Qué os aproveche!!
Fuente: este post proviene de Los cerezos en flor, donde puedes consultar el contenido original.
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