Además de prepararlas en casa para la familia, también es habitual ir a comerlas con la cuadrilla a un restaurante especializado en el plato. Entonces hablamos de "ir de alubiada", y la comarca vizcaína de las Encartaciones es muy popular para ello, en cuyos restaurantes aún se preparan en las tradicionales pucheras. Que qué es una puchera os preguntaréis. La puchera, también llamada olla ferroviaria, es un aparato inventado por los trabajadores del ferrocarril de la zona para aprovechar los carbones de la máquina para hacerse la comida. Metían los carbones en la puchera y éstos calentaban la cazuela con la que cocinaban.
Podéis encontrar más información sobre las pucheras en la web de estos fabricantes.
Ésta es mi aportación para el Día del cuchareo contra el frío.
DIFICULTAD: fácil
TIEMPO: 3 horas
INGREDIENTES (para 4 personas)
- 500 g de alubias de Gernika
- 3 chorizos
- 500 g de tocino ibérico
- 300 g de costilla
- 1 morcilla de arroz (debería ser de verduras, pero a mí es que me gusta más la burgalesa)
- 1 cebolla pequeña
- 1 puerro
- 1 diente de ajo
- 1 chorrito de aceite de oliva
- Sal
- Guindillas
PREPARACIÓN
- Lavamos las alubias y las ponemos en una cazuela con el puerro, la cebolla y el ajo, todos ellos enteros. Añadimos agua hasta cubrir, un chorrito de aceite de oliva y sal y calentamos. Una vez que rompa a hervir bajamos el calor y dejamos a fuego suave hasta que las alubias estén tiernas (2 horas y media más o menos).
* Durante la cocción iremos añadiendo agua fría poco a poco, de modo que las alubias siempre estén cubiertas.
* Para remover no usaremos ningún utensilio para no romper las alubias. Lo haremos cogiendo la cazuela con las dos manos y moviéndola en círculos.
- Por otro lado, ponemos los chorizos, la costilla y el tocino en la olla exprés, los cubrimos con agua y dejamos que cueza durante 45 minutos. La morcilla la cocemos aparte, como una hora a fuego suave cubierta de agua.
- Cuando las alubias estén listas, añadimos los tropiezos a la cazuela para que se calienten todos juntos.
- Una vez que todo esté bien caliente, sacamos los tropiezos de la cazuela y servimos por separado las alubias y la carne. Cada comensal decidirá si lo quiere comer todo junto o primero las alubias y luego los tropiezos.
- Acompañamos de guindillas de Ibarra.