En esta ocasión la encargada de elegir ingrediente era Eva de Dulzura extrema, la letra D y se decantó por el dulce de leche.
Así que manos a la obra para investigar (teníamos dos meses por delante porque Ana nos dio vacaciones veraniegas, jijiiii) y a sacar el máximo partido al bote de este maravilloso manjar.
Aggg muchas posibilidades han sido las que he encontrado y seguro que más de una caerá para dar por acabado el bote, pero para el reto me he decidido por este Banoffee Blondies.
¿Y esto qué es lo qué es? pues simplemente una delicia. Banoffee deriva de dos palabras inglesas: banana + toffee (plátano + caramelo) aunque es muy común también utilizar el dulce de leche.
Y Blondies, es una especie de brownie, pero en lugar de tener el cacao como ingrediente principal es el azúcar moreno, dando al "bizcocho" un color rubito.
Pues si las dos palabrejas por separado prometen unas recetas deliciosas, imaginaros combinándolas, una explosión de postre.
Precalentar el horno a 180º. En una bandeja apta para el horno (tiene que ser de tamaño pequeñita, cuadrada) poner papel vegetal.
Derretir la mantequilla en el microondas (que no llegue al punto de líquido total, pero un poco más blanda que la textura pomada)
Mezclar bien los dos tipos de azúcar. Añadir la mantequilla y cuando esté todo bien integrado los huevos de uno en uno. Añadir la cucharita de esencia de vainilla.
Chafar el plátano hasta que quede papilla y añadir a la mezcla anterior. Cuando esté todo integrado incorporar la harina y mezclar bien con una espatula hasta que no quede ningún grumo. Añadir gotas o perlitas de chocolate al gusto, mezclar y volcar en la bandeja que tenemos preparada.
Alisar la mezcla y repartir montoncitos de dulce de leche por encima de toda la mezcla. Con un palillo repartir alguno de estos montoicitos para que se mezcle con la preparación y otros dejarlos tal cual. Podéis cubrir también con más perlitas o gotas de chocolate.
Meter al horno y hornear unos 20 minutos (recordad: pinchar con un palillo y tiene que salir limpio).
Fuente: este post proviene de tothom a la cuina, donde puedes consultar el contenido original.
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