Seguimos con las recetas navideñas. Esta vez me he decantado por un bizcocho de jengibre, porque me parece que el jengibre es un ingrediente muy típico de estas fiestas, y porque además no lo había probado nunca y me picaba la curiosidad. Pero esta vez, como bien dice el refrán: la curiosidad mató al gato.
Y no, no es que haya muerto nadie por probar el bizcocho. Nada más lejos de la realidad. Pero si que me ha decepcionado bastante. Por no decir muchííííísimo. Y es que me esperaba otra cosa, no sé.... Ya sabía que iba a tener mucho sabor a jengibre, que no es uno de mis sabores favoritos, pero ya me habia hecho a la idea, ya estaba preparada mentalmente. Lo que no me esperaba era la desagradable sorpresa de otro de los ingredientes: la melaza.
No sé si habéis probado alguna vez la melaza. Yo, desde luego, no. Porque ya os digo que si la hubiera probado antes, seguramente no la hubiera utilizado para hacer este bizcocho. Tiene un sabor súper fuerte, como a regaliz. Y yo odio el regaliz. Creo que me habría salido mejor si hubiera usado miel en vez de melaza. Para mí es un sabor demasiado fuerte. Igual que no me gustan las cosas muy picantes, ni demasiado especiadas. Soy más de sabores suaves.
El primer bocado que le he dado, os podéis imaginar mi cara. Yo toda emocionada por saber cómo había quedado, con la buena pinta que tenía... y al probarlo casi me caigo al suelo... ¡¡Pero que sabor más horrible!!
Yo me esperaba una delicia, porque del blog de dónde he sacado la receta, All sorts of pretty, decían que era el mejor gingerbread del mundo. Pues vaya...
Ya se sabe que para gustos, los colores. Hay gente a la que sí le gustan este tipo de sabores. Sin ir más lejos, a mi pareja le ha encantado, sobretodo porque es un fan incondicional de todo lo que lleve jengibre.
En fin, si aún así, después de estas palabras desmoralizadoras, hay algún valiente con ganas de probarlo, aquí tenéis la receta.
BIZCOCHO DE JENGIBRE CON GLASEADO DE LIMÓN
INGREDIENTES:
Para el bizcocho:
110 gr. de mantequilla
1 taza de azúcar moreno
3 huevos M
3/4 de taza de agua hirviendo
3/4 taza de melaza (yo le pondría mucha menos o la sustituiría por miel)
320 gr. de harina
2 cucharadas de bicarbonato
pizca de sal
2 cucharadas de jengibre molido (si puede ser natural, mejor)
Para el glaseado:
200 gr. de azúcar glacé.
Zumo de 1 limón
PREPARACIÓN:
Precalentamos el horno a 180º. Engrasamos el molde que vayamos a utilizar. Yo he usado uno de plum cake, pero podéis usar cualquiera.
Batimos la mantequilla con el azúcar, hasta que quede una masa cremosa.
Introducimos los huevos uno a uno removiendo bien tras cada adición.
Añadimos el agua hirviendo y la melaza. Removemos.
Añadimos la harina junto con el bicarbonato, la sl y el jengibre. Removemos hasta que quede todo bien incorporado.
Vertemos en el molde e introducimos en el horno durante mínimo 40 minutos (según el molde, como el mío era de plum cake ha tardado algo más). Pinchar con un palillo en el centro del bizcocho y cuando salga limpio es que ya está.
Dejar en friar en una rejilla y mientras tanto prepararemos el glaseado.
Poner en un bol el azúcar e ir incorporando poco a poco el zumo de limón sin parar de remover con un tenedor.
Una vez tengamos una pasta homogénea ir echando por encima del bizcocho poco a poco.
TIEMPOS:
Preparación: 10 minutos
Cocción: 40 minutos
Total: 50 minutos