Este bizcocho salió de casualidad, pensaba hacer otra cosa con los orejones y no sé por qué derivó en esto, pero el resultado es sensacional, un bizcocho jugoso, dulce y con un toque especial.
INGREDIENTES:70 gr de orejones.
4 huevos.
1 yogur griego.
170 gr de azúcar.
180 gr de harina.
1 sobre de levadura química.
20 gr de almendra molida.
70 ml de zumo de naranja.
PREPARACIÓN:
Trituramos los orejones 10 segundos a velocidad 10.
Añadimos el yogur y mezclamos 10 segundos a velocidad 4.
Agregamos los huevos, el azúcar, la harina de almendra y mezclamos 30 segundos a velocidad 4.
Incorporamos el zumo de naranja y batimos a velocidad 4 unos 20 segundos.
Por último la harina y la levadura y mezclar todo 30 segundos a velocidad 3.
Vertemos la masa en un molde desmoldable previamente engrasado y horneamos unos 35-40 minutos a 180º. Comprobamos con un palillo si sale seco
SIN THERMOMIX:
Con la batidora eléctrica trituramos los orejones, no importa que no queden del todo triturados, añadimos el yogur y mezclamos bien. Vamos incorporando el resto de los ingredientes y mezclando, dejando para lo último la harina y la levadura. A partir de aquí, seguimos como se explica más arriba.
Trituramos los orejones.
Y le añadimos el yogur.
Huevos, azucar, harina de almendra... todo bien mezclado.
Ahora el zumo de naranja.
Y por último la harina y la levadura. Todo bien mezclado.
Vertemos la masa en un molde bien engrasado. No importa que los orejones no estén del todo triturados así quedan tropezones. Al horno.
Es un bizcocho muy tierno, con sabor dulce a la naranja y a los orejones.
Podemos espolvorear con azúcar glass por encima, os va a gustar.
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Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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