Hace unas semanas tuve dos días libres y les prometí a mis compañer@s volver con algo dulce, por unanimidad decidieron que fuese con mucho chocolate así que buscando que preparar me topé con esta receta del libro "Cupcakes" de Marcela Capo. Son mortales de necesidad ya que están buenísimos y se preparan en poco tiempo. Os dejo la receta por si queréis prepararlos.
Ingredientes para 12 cupcakes ( A mí como siempre, me salieron 18) 180 gr de mantequilla a temperatura ambiente 180 gr de azúcar moreno 4 huevos 100 gr de lágrimas de chocolate 300 gr de harina leudante ( Utilicé bizcochona integral) 25 gr de cacao amargo ( yo le puse 40 gr) 4 cucharadas soperas de leche
Modo de preparación:
Precalentamos el horno a 160 º sin aire y preparamos las cápsulas en un molde apropiado. Tamizamos la harina junto con el cacao y reservamos. Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que este cremosa y añadimos los huevos de uno en uno previamente batidos y esperando a que cada uno se integre antes de añadir el siguiente y sin dejar de batir. A continuación incorporamos la leche, mezclamos bien y añadimos las lágrimas de chocolate y seguimos mezclando. Incorporamos la harina y cacao poco a poco y removemos no demasiado con movimientos envolventes.
Repartimos la masa en las cápsulas un poco más de la mitad, introducimos en el horno durante unos 30 minutos aproximadamente ( dependerá de cada horno) y pinchamos para saber si ya están hechas. Yo las hice en dos hornadas. Sacamos del horno y dejamos reposar 5 minutos, a continuación pasamos a una rejilla y dejamos enfriar totalmente.
Podemos congelarlas durante tres meses envolviéndolas bien en film.
Decoré las seis primeras con ganache de chocolate negro (receta aquí), formando una rosa grande con
la boquilla 1M de Wilton y le añadí una flor y hojitas de glasa que tenía reservadas.
Estas cupcakes no llegaron al trabajo, alguien llegó y se las llevó para desayunar al día siguiente con las amigas.
Aunque había suficiente ganache, no llegaba para formar rosas tan grandes, así que unté bien las seis siguientes y les incorporé unas rosetas de glasa morada que también tenia reservadas.
Estas, las compartí con mis dos compañer@s de despacho. No querían que las enseñase ya que me dicen que no es necesario que nadie más de su opinión sobre los dulces que llevo de vez en cuando, je,je,je
Las seis últimas las unté también con ganache y las decoré con fondant en dos colores, naranja y blanco, utilicé un cortante con forma de ondas y le hice unas marcas formando una especie de acolchado, les puse las flores y hojitas de glasa y estas también me las llevé al trabajo. Volaron enseguida
Espero que os gusten