Las bodegas 'Las Granadas Coronadas' han encontrado el punto de fusión entre la elaboración de un caldo de gran calidad y un espacio donde disfrutar con todos los sentidos del mundo que rodea a la cultura del vino: desde los cultivos hasta su cata y degustación. Con una superficie de 100 ha. de viñedos y una capacidad de almacenamiento de 2 millones de litros, este lugar se ha convertido en todo un lujo para los amantes de los buenos caldos.
Rubén Cancho, enólogo de 'Las Granadas Coronadas', nos acompaña por este paseo a lo largo del proceso de producción y nos presenta a las estrellas de la bodega. Además, nos muestra las modernas instalaciones y los detalles de las vidrieras que ilustran el mundo de la vinicultura.
La uva de calidad
Para obtener un vino irrepetible, la materia prima ha de recibir delicados cuidados. Las viñas se conducen por espalderas y se nutren gracias al riego por goteo. Para que la plantación se desarrolle en toda su grandeza y los viñedos no se vean privados de nutrientes en su crecimiento "el marco de plantación es de 3 m. de calle por 1,20 m. entre planta y planta, siendo el número de plantas por hectárea de 2.800 unidades", explica Cancho.Los viñedos de 'Las Granadas Coronadas' son prácticamente ecológicos ya que sólo se curan con azufre. Las variedades que ofrecen son Cabernet Sauvignon y Petit Verdot.
No existe momento exacto para llevar a cabo la vendimia. Para decidir cuándo ha de realizarse se toman uvas aleatoriamente de distintas plantas y racimos. "Las muestras son analizadas en el laboratorio en busca de los siguientes parámetros: grado Beume (azúcar), IPT (Índice Poliferoles Totales), pH y acidez total. Si son óptimos, se inicia la vendimia", afirma Cancho.
Cuidados en la elaboración
Cada uva se recoge a mano y se deposita y transporta, en perfecto estado sanitario, en cajas que llegan a contener entre 18 y 20 kg. de fruta. Una vez en las bodegas se encuba, es decir, se introducen las uvas en depósitos donde, durante unos 20 días, fermentan a una temperatura que no supera los 33 ºC. La temperatura, en cualquier sala de la bodega, es una de las variables más importantes, en este caso debe oscilar entre los 18 y los 20 ºC.El siguiente paso consiste en clarificar el caldo con clara de huevo. A continuación, se introduce éste en barricas de roble francés y americano entre 12 y 15 meses, dependiendo de los análisis físico-químicos y organolépticos, realizando un trasiego cada seis. En esta sala, donde se conservan los grandes barriles, la temperatura debe mantenerse en los 12 ºC, de forma constante.
La madera que conforma las barricas posee un papel protagonista en la calidad del producto final. Como nos explica el enólogo: "Es fundamental en el cuidado y conservación, ya que es muy porosa y la suciedad puede colmatar los poros". De ocurrir esto último, "no habría intercambio de oxígeno entre madera y vino, provocando una mala crianza". Además, con la madera de roble se pretende dar un gusto al vino a vainilla, café, torrefactos, etc.
Finalizado el proceso anterior, el vino se embotella para su expedición. Nos encontramos ya ante los grandes protagonistas de las bodegas 'Las Granadas Coronadas': sus tintos, Torre Julia, Taryala, Lagares; y su blanco, Altamirano.
Torre Julia, reserva
Recibe su nombre de una de las torres más emblemáticas que encontramos en la ciudad de Trujillo, Cáceres. Su composición es 100% Cabernet Sauvignon.Su elegante color rojo picota brillante y su aroma a fruta roja y especias ofrecen al paladar un largo y equilibrado sabor. Ideal para tomarlo acompañando carnes, asados y patés a una temperatura de unos 16-18 ºC.
Taryala, crianza
Este nombre, Taryala, es el que los árabes le dan a Trujillo cuando entran en ella en el año 714. Una composición a partes iguales de Cabernet Sauvignon y Tempranillo son las causantes de este caldo granate Burdeos. Su aroma ofrece a los mejores paladares trufas y fruta confitada en excelente armonía. Un final larguísimo en la boca, perfecto para acompañar asados y quesos curados. Su temperatura ideal: entre 15 y 17 ºC.Tinto de Lagares
Acoge el nombre de la sierra que rodea las bodegas y descubre una composición cargada de Tempranillo pero con toques de Cabernet Sauvignon.Su rojo vivo deslumbra con reflejos violáceos. Las carnes asadas agradecerán su compañía y su ligero post-gusto en el paladar.
Altamirano, blanco joven
Y para acompañar mariscos y pescados nada mejor que este afrutado, expresivo y fresco, que debe tomarse a unos 7 ó 9 ºC.Su aspecto brillante y color pajizo responde a las expectativas de un blanco con aromas florales para disfrutar en cualquier momento.
D. O. 'Ribera del Guadiana'
Para poder entrar dentro de las variedades galardonadas con la D. O. P. es necesario cumplir ciertos parámetros que aseguren la calidad y la cuidada elaboración de los caldos. Además de estar dado de alta en el Consejo Regulador, es necesario que los viñedos no produzcan más de 8000 kg./ha. De está forma se aseguran una uva de supremas cualidades para la producción vinícola.Por otro lado, los vinos han de pasar una serie de análisis físico-químicos y organolépticos. "Si se trata de un crianza, éste debe estar, como mínimo, 6 meses en barrica y puede pasar hasta 24 meses en depósito o botella. En el caso de los reservas, hablamos de un mínimo de 12 meses en barrica, y hasta 36 embotellado", explica Rubén Cancho.