Hace unos días tuve la posibilidad de conocer las bodegas Valduero, un de las más importantes de la Ribera del Duero y ubicadas en Gumiel de Mercado, en la provincia de Burgos y muy cerca de Aranda de Duero. Son de origen familiar y surgieron en 1984 a cargo de Gregorio García Álvarez, mientras que en la actualidad son sus hijas las que las sacan adelante.
Se encontraban en plena vendimia, lo que añadió un punto más de encanto si cabe a la visita. Las cepas estaban llenas de racimos de uva en su punto y que pudimos probar. Os cuento todo a continuación.
La visita empieza precisamente en sus viñedos, con una superficie de 200 hectáreas de las que 12 son de uva albillo. Os aclaro que en Valduero no hacen vino joven, empiezan por el Crianza. Posteriormente se pasa al interior de una montaña en el que se encuentra la bodega en sí. Esta ubicación permite que el vino no cambie de temperatura en todo el año y se conserve en perfectas condiciones.
Consta de tres fases. En la primera se encuentran los depósitos de acero inoxidable; en la segunda las barricas de roble francés, americano y húngaro en las que envejece el vino y, en la tercera, un original botellero realizado de manera íntegra en madera en la que espera pacientemente a ser descorchado. Esta nave alberga también un secreto, un museo inaugurado por el artista Antonio López compuesto por obras realizadas por estudiantes de arte que han creado esculturas partiendo de barricas ya usadas.
Tras conocer esta parte, la visita prosigue por un laberíntico recorrido de cuevas llenas de barricas en las que reposa el vino destinado a ser gran reserva y que desemboca en el primer club social del mundo creado en torno al vino: la Membresía La Tenada y que tiene el honor de contar entre sus miembros con Plácido Domingo, Ana Rosa Quintana, Carlos Herrera, Pau Gasol, el Gran Wyoming, David Trueba, Loquillo, Ken Follett y muchas más celebridades nacionales e internacionales.
Para formar parte es necesario adquirir el vino que contiene una barrica, 225 litros o el equivalente a 300 botellas, que se entregan personalizadadas con tu nombre y número de socio. A cambio puedes invitar a comer a veinte personas en la bodega, a conocerla y a disfrutar de una cata.
Y, hablando de catas, al terminar la visita nosotros también pudimos disfrutar de una. En ella conocimos en primer lugar el blanco Viadero Albillo (fuera de la denominación de Ribera del Duero); Valduero Crianza (15 meses en barrica de roble americano y francés y 12 meses en botella); Valduero Una Cepa (su nombre se debe a que cada cepa sólo da una botella de vino); Valduero Reserva (30 meses en barrica de roble y 18 meses en botella); Valduero 6 años (36 meses en barrica y otros 36 en botella); Valduero Rosado (criado 6 meses en barrica de roble francés y en botella un tiempo variable).
Para terminar, pudimos disfrutar de una comida muy tímida de Castilla: chorizo al vino, morcilla, queso, sopa castellana y lechazo. ¿No os están entrando ganas de conocer la bodega hoy mismo? Yo desde luego os recomiendo que llaméis para pedir cita, es una experiencia única.