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Si algo nos pierde a muchos es el chocolate y ¿cuál es el postre de chocolate por excelencia? Efectivamente, el Brownie.
Es un postre (o desayuno, o merienda, o pa-comer-a-todas-horas) increíblemente fácil de preparar y delicioso, pero para salirme un poco de lo típico decidí que en esta ocasión lo prepararía con chocolate blanco, que ya de paso es mi favorito.
Oi qué bonito, mira como gira y gira y gira y gira y gira…
¡Pongámonos manos a la obra!
Los ingredientes que vamos a necesitar para 2 personas son:
75 grs de chocolate blanco
56 grs de mantequilla
100 grs de azúcar
½ cucharadita de vainilla
2 huevos medianos
48 gr de harina
Una pizca de sal
Preparación:
En primer lugar vamos a precalentar el horno a 180º. Mientras dejamos que vaya calentando vamos a fundir el chocolate junto con la mantequilla hasta conseguir una mezcla homogénea, esto es, meterlo en el microondas y luego darle duro con el batidor de varillas.
Cuando hayamos conseguido que se quede todo mezcladito le añadimos el azúcar y la vaina de vainilla (que habremos rascado previamente) y volveremos a remover todo hasta que se mezcle completamente.
En este punto la mezcla habrá dejado de ser líquida, pero que no cunda el pánico, está todo bien. A continuación le añadiremos los dos huevos, mezclaremos bien y voilà, ya hemos recuperado el estado líquido de nuevo, ahora toca echarle la harina y volver a darle duro con el batidor de varillas, tenemos que conseguir que se quede todo mezclado y sin grumos, así que puede que nos tome un rato.
Finalmente le añadiremos la pizca de sal y volveremos a remover. Ya sólo nos queda verter la mezcla dentro de un recipiente apto para horno, yo uso un molde de silicona, eso sí, antes de verter la mezcla no está de más untar el recipiente con un poco de aceite o mantequilla para evitar que el brownie se quede pegado y que sea más fácil sacarlo cuando ya esté listo.
Una vez untado y vertida la mezcla, lo meteremos en el horno que ya estará calentito y expectante y lo dejaremos unos 20 minutos.
Recordad que el brownie no tiene que quedar completamente seco, así que cuando comprobéis la cocción, el palillo tiene que salir un poco húmedo.
¡Espero que os haya gustado esta receta y que disfrutéis de vuestro brownie!
Y por si alguien quiere todo el proceso escenificado:
¿Videoreceta? ¡¡¡VIDEORECETA!!!
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