Con esta receta tenemos unos cacahuetes fritos algo menos calóricos que los comprados y podemos darles nuestro toque personal con especias, como curry, pimentón, ras el hanout,... y disfrutar de sabores distintos. Una vez fríos se guardan en un bote, mejor si es de cristal, y nos aguantan bien un par de semanas. También podemos utilizarlos en majados para guisos.
-250 g. de cacahuetes crudos con piel
-2 cucharadas de aceite de girasol
-una cucharadita de especias
(yo les puse pimentón picante)
-pizca de sal
En una sartén ponemos los cacahuetes y el aceite. A fuego lento los freímos removiendo constantemente hasta que cambien de color (unos 15 minutos).
Añadimos el pimentón o las especias y seguimos removiendo hasta que se impregne todo.
Sacamos a un plato y añadimos la sal. Dejamos que se enfríen por completo antes de guardar o comer.
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