Hoy os vamos a hablar de la cervecería y restaurante "El Tinglao", situada en la zona de Campo de las Naciones de Madrid. Ahora durante el verano, cuenta con una amplia terraza y dos salones interiores decorados de forma moderna y acogedora.
Fuimos a comer porque nos llamó la atención este local que pertenece al mismo grupo que el restaurante "La Canica", también muy famoso en Madrid y el cual nos gustó cuando lo visitamos.
Pedimos varios entrantes para compartir y un segundo plato cada uno, las raciones nos parecieron bien en cuanto a cantidad, quizás con un precio algo elevado, aunque de sabor están ricas.
Patatas bravas
Calamares a la romana
Croquetas
El plato que más nos gustó como entrante fueron los calamares, muy crujientes y cortados muy finos. Las patatas bravas tenían un ligero toque picante, correctas. Por último, las croquetas sí os las recomendamos sin duda porque su bechamel es muy ligera y tienen mucho sabor. Vienen acompañadas de patatas fritas especiadas con pimentón, muy originales y riquísimas.
Soldaditos de pavía
Raviolis de cochinita pibil a la huancaína
Merluza a la plancha con verduras
Canelones de pollo con salsa de foie
En cuanto a los segundos, pedimos platos bastante variados, los soldaditos de pavía estaban crujientes y con el bacalao muy suave, nos gustaron mucho. Los raviolis de cochinita pibil nos parecieron muy originales y los encantó que vinieran acompañados de salsa huancaína, ¡nos encanta!
La merluza a la plancha estaba en su punto, y los canelones de pollo con salsa de foie fueron sin duda el plato estrella, cuando vayamos repetiremos seguro porque eran una delicia, la salsa hacía que los canelones estuvieran jugosísimos y se deshacían en la boca, ¡tenéis que pedirlos sí o sí!
Helado de chocolate y plátano
Helado de turrón
Para el postre pedimos dos helados, el más original de plátano, muy muy rico, y el de turrón también con mucho sabor. Nos quedamos con ganas de probar más postres, pero con el calor que hacía estos días lo que más nos apetecía era un helado fresquito.
Fuimos 6 personas a comer allí un domingo a mediodía, sí tardaron algo más de tiempo del esperado en atendernos, nos trajeron un par de platos que no habíamos pedido y tuvimos que pedirles a diferentes camareros que nos trajeran más agua varias veces. El local lleva poco tiempo abierto, por ello les daremos una segunda oportunidad, ya que el personal necesitaba un poco de rodaje que seguro que de aquí a unos meses tendrán.
Bon appétit!
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