¡¡Funciona!! sí que funciona, y el resultado son unas preciosas tartas con un reflejo espejo espectacular, se ven tan bonitas... y muy profesionales.
Tenía mis dudas ¿se quedará la cobertura o escurrirá por las paredes del bizcocho pasado unos minutos? o por el contrarío ¿será muy pegajosa? ¿demasiado dulce? ¿el color quedará llamativo? ¿demasiado delicada? ¿perderá el brillo pasadas unas horas?
La cobertura cubre perfectamente el bizcocho, es bastante dulce pero al quedar una capa muy fina sobre la tarta no es para nada empalagosa, está riquísima, acabada de poner sobre el bizcocho sí que es una cobertura delicada, pero después de reposar unas horas en el frigorífico gana elasticidad y es más resistente, aunque sigue siendo un bocado agradable, no pierde el brillo ni a las pocas horas ni un día o varios después de ponerla sobre el bizcocho (lo he comprobado) y con respecto al color... pasadas unas horas el color se vuelve más intenso, la prueba está en las propias fotos que podéis ver en esta publicación.
Empecé a fotografiar la tarta prácticamente una hora después de haber puesto la cobertura, pero no puede terminar la sesión de fotos así que lo dejé para el día siguiente y para mi sorpresa al día siguiente el color rosa de la tarta era más intenso, el brillo seguía perfecto, y la cobertura más elástica y resistente.
Esta capa dulce espejo se mantiene perfectamente en la nevera, es más, os aconsejo que la dejéis reposar un mínimo de un día en el frigorífico aun estará mejor pasadas 24 horas.
Otro aspecto positivo de esta cobertura espejo es que si en vuestro bizcocho ha quedado algún agujerito durante el horneado, lo rellena y deja la superficie lisa y perfecta, con un acabado de pastelería profesional. En resumen, os la recomiendo al 100% y además es muy sencilla de hacer.
Para que podáis comprobar lo sencilla que es hacerla he hecho un vídeo, el que os pongo a continuación https://youtu.be/BdNwi5OFG1E
Una vez presentado el vídeo os voy a escribir la receta
COBERTURA ESPEJO PARA TARTAS Y PASTELES
INGREDIENTES
Para cubrir dos tarta de 15 cm de diámetro por 10 cm de altura
♥ 20 gr de gelatina neutra, es decir sin color y sin sabor. La he usado esta vez en láminas pero también podéis utilizarla en polvo
♥ 120 ml de agua (Para hidratar la gelatina)
♥ 300 gr de glucosa
♥ 300 gr de azúcar
♥ 150 ml de agua
♥ 200 gr de leche condensada
♥ 300 gr de chocolate blanco
♥ Colorante comestible para chocolate, el que usé es de la marca Wilton
♥ Un bizcocho, yo hice uno de chocolate, el bizcocho especial para tarta fondant pero sin la harina extra, de esta forma está más esponjoso, la receta lo podéis encontrar pinchado aquí.
HERRAMIENTAS IMPRESCINDIBLES
♥ Un termómetro de cocina, para calcular el momento exacto en el cual la cobertura está lista para verterla sobre el bizcocho.
♥ Una batidora de mano para asegurar que el chocolate está integrado en la receta.
♥ Un colador para colar la cobertura dejándola sin grumos.
LA DECORACIÓN
Por sí sola la cobertura espejo es preciosa y las tartas quedan muy bonitas, pero también podéis añadirle algo de decoración. Yo la he decorado con Corazones de Marshmallows y sprinkles de diferente tamaños y formas, pero podéis hacerlo con lo que más os guste, fruta, flores de pasta de goma, flores comestibles, galletas...
PREPARACIÓN
Lo primero que haremos es refrigerar el bizcocho un mínimo de 30 minutos, debe estar frío antes de ponerle la cobertura espejo.
Hidrataremos los 20 gr de gelatina con los 120 ml de agua. Pondremos la gelatina en un bol y le añadiremos el agua, dejaremos que se hidrate aproximadamente 5 minutos, mientras que se hidrata continuaremos con el resto de la preparación.
En un cazo u olla pondremos la glucosa, el azúcar y los 150 ml de agua,
llevaremos el preparado al fuego medio, sin parar de mover la mezcla esperaremos a que hierva.
Después de hervir retiraremos del fuego y le añadiremos la gelatina que ya estará hidratada, daremos unas vueltas hasta que se integre totalmente.
A continuación incorporaremos la leche condensada
y cuando esté integrada el chocolate blanco partido en pequeños trocitos. Moveremos con una espátula.
Para terminar de integrar el chocolate a la cobertura usaremos la batidora de mano
Añadiremos unas gotas de colorante especial para chocolate a la cobertura y batiremos un poco más hasta que el color esté homogéneo. Como ya os he adelantado en el introducción de esta publicación el color gana en intensidad a medida que pasan las horas.
Para terminar colaremos la mezcla, ahora tenemos que dejarla reposar para que enfríe y también pierda la burbujitas que se han formado durante el batido.
Con un termómetro de cocina iremos controlando la temperatura, debemos esperar hasta que la cobertura baje hasta los 30ºC
Cuando esté cerca de la temperatura adecuada, aproximadamente 32ºC la paseremos a un recipiente más cómodo para verterla sobre el bizcocho, y de paso le daremos unas vueltas suaves con una espátula, durante el reposado se forma una fina película sobre la superficie de la cobertura pero desaparece fácilmente.
Cuando la cobertura esté a 30ºC ha llegado el momento de verterla sobre el bizcocho frío acabado de extraer del frigorífico.
Pondremos el bizcocho sobre cualquier objeto que tengamos en casa, más pequeño que el diámetro de nuestro bizcocho, de esta forma los bordes del bizcocho sobrepasarán el objeto y la cobertura podrá deslizarse sin problema dejando perfectamente cubierto el bizcocho de arriba a bajo, a la vez pondremos el objeto y el bizcocho sobre una bandeja, es la que recogerá el exceso de cobertura que caiga. . Podéis usar una taza, vaso, jarra... En mi caso ha sido un poco más complicado... cómo no...
Si os fijáis en mi bizcocho tenía un agujero en el centro y opté por una rejilla, de las que usamos para enfriar la repostería, para poder desalojar la cobertura que caía por el centro del bizcocho.
Una vez preparado el bizcocho verteremos una primera capa de cobertura, dejaremos que escurra el sobrante y refrigeraremos 10 minutos en el frigorífico
Seguiremos manteniendo la temperatura de la cobertura que nos queda por verter a 30ºC
Pasados los 10 minutos volveremos a derramar una segunda capa sobre el bizcocho, dejaremos que escurra el sobrante
y volveremos a refrigera 30 minutos antes de decorar. Si queréis podeís volver a verter una tercera capa pero con dos quedó perfectamente cubierto el bizcocho con una llamativa y preciosa cobertura espejo.
DECORACIÓN
Después de dejar reposar la tarta, con mucho cuidado la retiré de la rejilla y la puse sobre un stand de tartas.
Con unos corazones rebozados con azucarado de fresa ácida, ¡están riquísimos! desde pequeña me ha encantado la fresa ácida... y unos sprinkles acabé de decorar la tarta.
La mantuve refrigerada en la nevera dos días y cuando llegó el día de comerla estaba perfecta, con un brillo que sorprendió a todo el que la comió, la cobertura elástica pero a la vez agradable al bocado. En resumen, una tarta sencilla de hacer, llamativa, preciosas, deliciosa y con un acabado profesional.
La semana que viene os enseñaré a hacer esta cobertura pero de chocolate negro, la receta es bastante diferente pero el resultado es igual de bueno, todo esto y mucho más os lo contaré en unos días.
Besitos ♥