Al fin me he decido a hacerlos, dos intentos en una semana, y para ello he recurrido a la receta de una de las gurus de los cupcakes: Alma de objetivo cupcake perfecto
Para hacerlos se necesitan unos ingredientes un poco fuera de lo común en las cocinas "normales": buttermilk, bicarbonato, colorante rojo y cacao puro. La primera vez que los hice de todas estas cosas solo tenía el colorante rojo. Pero para las demás hay solución. Como cuenta Alma, el buttermilk se puede sustituir echando un poco de zumo de limón en leche y dejándolo reposar 5 minutos. Respecto al cacao y el bicarbonato, Alma no dice nada, pero yo sustituí el bicarbonato+vinagre por una cucharadita de levadura y el cacao por colacao. Después de probar las dos versiones, bueno, el sabor no es exactamente el mismo pero... ¡¡están igual de buenos!!
Receta de cupcakes Red Velvet:
55gr de mantequilla
150gr de azúcar
1 huevo M o L
1 cuchara de cacao puro sin azúcar
1 cucharita de extracto de vainilla
120ml de buttermilk (recordar el truco)
150 gr de harina
Colorante rojo
1 cucharadita de vinagre blanco
1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
Con estas cantidades Alma dice que le han salido 8 cupcakes grandes, yo he hecho 20 minis. Bueno 22, pero es que según los hacía he caído en la tentación.
Todos los ingredientes, como siempre, deben estar a temperatura ambiente.
Lo primero es ir precalentando el horno a 170º y dejar preparadas la cápsulas. Después ya se puede empezar con la receta en si, para ello hay que batir la mantequilla con el azúcar y el huevo. Luego, sin dejar de batir, añadimos la esencia de vainilla, la mitad de la harina, tamizada of course, el cacao y el buttermilk. Cuando esté bien ligado se añade el resto de la harina. Ahora es el momento de añadir el colorante rojo. A Alma la salen más rojo, yo no he querido añadir más colorante, no me gusta echar mucho, al fin y al cabo es colorante. Lo que pasa que con el cacao es difícil conseguir un rojo intenso.
El bicarbonato se usa como sustituto de la levadura. Para ello se une en un vaso el vinagre con el bicarbonato y se echa en seguida en la mezcla. No sé si yo no lo hice bien pero la cuestión es que no subieron mucho, aunque cuando hice el intento con la levadura quedaron con demasiado aire dentro (no sé explicarlo mejor) Por ello os recomiendo llenar las capsulas más de la cuenta.
¡Ah! está mezcla es muy líquida, cuando la tuve hecha me fije por si me había equivocado con la cantidad de harina pero no, estaba bien. Me vi tentada a echar un poco más pero decidí probar primero así y si no salían bien echar un poco más. ¡Salieron buenísimos!
Con la masa se rellenan las cápsulas y al horno. Los cupcakes minis los he dejado 20 minutos y han quedado en su punto. Alma dice que los grandes también los ha dejado 20 minutos, pero como cada horno es un mundo yo os recomiendo después de los 20 minutos pincharlos para comprabar que están listos (el truco del palito que sale limpio)
Para decorarlos se usa tradicionalmente un frosting de queso. Pero esta vez, en vez de seguir la receta del frosting tradicional que tenéis pulsando el enlace de antes, he puesto mucha más mantequilla para que se pueda "levantar" el sobre el cupcake. Para batir el queso os recomiendo hacerlo a mano, ya que no se debe batir mucho porque sino se hará líquido del todo.
¡Ah! se me olvidaba, como cualquier cupcake está receta también se puede hacer como un bizcocho y luego rellenarlo o cubrirlo de frosting de queso.
Ainsss ¡¡¡¡necesito ya un objetivo para enfocar de cerca!!!!