La cebolla es un ingrediente que no falta en ninguna casa donde se cocine a diario, puesto que es la base de los sofritos y de la mayor parte de las recetas que se preparan.
En la misma proporción que es útil en la cocina, es difícil manipularla, siendo, quizás, una de las principales y más molestas consecuencias de su uso el picor de ojos y las consecuentes lágrimas que genera. Esto se debe a que en las células de este bulbo se encuentran unas sustancias que contienen azufre y éste al volatilizarse, produce el escozor. Existen numerosos trucos para atenuar esas molestias. Nosotros, te apuntamos dos muy sencillos.
Otro problema que origina la cebolla al manipularla es que, al estar compuesta de capas, éstas a veces se sueltan y hacen tedioso picarla. Para que no tardes más en este proceso, te apuntamos una sencilla técnica de corte.
Aunque la cebolla guste por su sabor, cuando la ingerimos en crudo, por ejemplo en ensaladas, éste puede ser en ocasiones bastante fuerte. Para atenuarlo, tenemos dos sencillos consejos.
¿Cómo evitas tú el picor de la cebolla? ¿Te resulte complicado picar cebolla? ¿Te gusta su sabor consumida cruda?
Imágenes: primera, Muffet/Flickr; segunda, tsakshaug/Flickr
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