El otro día vi en el blog “Cocinar con amigos” uno de sus post “8 recetas de conejo”, me dio la idea de cocinar de una forma bien diferente un cuarto de conejo que tenía perdido por la inmensidad de mi congelador.
Aunque me encanta la carne, justamente la carne de conejo es la menos preciada por mi paladar, así que esta receta me pareció perfecta para experimentar un sabor diferente del conejo.
Realmente la receta es de otro blog, del blog “Per sucar-hi pa” (traducido seria “Para mojar pan”) y la receta en cuestión es… “Repápalos de conejo”.
Ingredientes (12 repápalos):
¼ conejo
1 cebolla
3 huevos
Pan rallado de ajo y perejil
Pimentón picante
½ pastilla de concentrado de carne
Sal
Aceite
Preparación:
En primer lugar introduciremos el conejo en una olla y lo cubriremos con agua y media pastilla de concentrado de carne.
Cocemos hasta que este tierno el conejo, alrededor de una hora, a fuego lento.
Mientas pelamos y cortamos en juliana la cebolla.
Freimos la cebolla en un poco de aceite hasta que este tierna y transparente.
Cuando el conejo este tierno, apagamos el fuego y lo dejamos enfriar para trabajar con comodidad (sin quemarnos).
Una vez frio el conejo, le quitamos su carne y eliminamos todos los huesos (en mi caso, los gatos se dieron un festín con ellos).
Picamos finamente el conejo (ya sin huesos con el cuchillo) y lo introducimos en un bol.
En ese mismo bol, introducimos los huevos, el pimentón, la sal, la cebolla que hemos confitado antes y agregamos pan rallado hasta obtener una textura más dura que la de una bechamel espesa, para poder moldear con comodidad los repápalos.
Dejamos reposar un poco (5 minutos), para que terminen de mezclarse los sabores.
Preparamos un plato con más pan rallado de ajo y perejil para pasar por el nuestras figuritas de repápalos.
Con ayuda de una cuchara sopera y moldes de cortar galletas, vamos dando forma a nuestra masa, aunque en la foto no pensé en colocarlo de forma que se apreciaran las formas.
Rebozamos con el pan que hemos colocado con anterioridad en un plato.
Freímos en aceite caliente y vamos dejando los repápalos fritos en un plato con papel absorbente para que este chupe el sobrante de aceite.
Nosotros lo acompañamos de patatas fritas y una ensalada de rúcula, que otro día os colocare la receta.