INGREDIENTES:
2 moldes iguales
Fondant blanco y negro (si no lo queréis hacer, podéis comprarlo ya hecho)
PARA EL BIZCOCHO:
50 grs. de azúcar80 grs.
80 grs. más de azúcar
3 yemas y 1 huevo entero
rayadura de limón o unas gotas de esencia de limón
100 grs. de harina
20 grs. de harina de maiz (maizena)
30 grs de almendra molida
colorantes para el bizcocho (yo usé el rojo y el azul)
CREMA PASTELERA:
1 ramita de canela (yo usé solo media ramita)
1/2l. de leche
1 huevo
3 yemas
40 grs. de harina y 10 de harina de maiz
100 grs. de azúcar
ELABORACION:
Precalentamos el horno.
Mezclamos en un bol las 3 yemas y el huevo junto con 50 grs de azúcar y el limón ,con las varillas hasta que se triplique.
Incorporamos las harinas y la almendra. Aparte batimos las claras de huevo con los 80 grs. de azúcar e incorporamos suavemente dándole vueltas con una espátula.
Separamos la masa en 2 partes iguales y les incorporamos el colorante hasta dar con el color que nos guste.
Los ponemos en el horno unos 25 minutos a 180º (dependiendo del horno).
Cuando esté frio desmoldamos.
En un cazo puse a hervir unas cucharitas de agua con mucha azúcar y le añadí licor de naranja (también podeis ponerle mistela), y se lo rocie por encima a los bizcochos. Eso va a gusto de cada uno.
Entre los bizcochos puse crema pastelera pero tambien podéis poner trufa o nata. Yo la hice poniendo 1/4 l. de leche a hervir con el azúcar y 1/2 ramita de canela. En otro bol ponemos 1/4 l. de leche fria, vamos añadiendo las 2 harinas y movemos sin que queden grumos, seguimos añadiendo el huevo y las yemas y movemos muy bien.Lo añadimos a la mezcla caliente y no dejamos de mover hasta que espese para que no salgan grumos. Dejamos enfriar y ya se puede utilizar.
Montamos los bizcochos y cubrimos con fondant blanco, hay que rematar muy bien los cantos y hacerlos redondeados. Luego con el negro, vamos haciendo los adornos y los pegamos pasando un pincel con agua. Tener paciencia y tiempo porque se requiere mucho de los dos. Si haceis los bizcochos el día de antes, lo tendréis mejor para montar la tarta. Una vez hecha, no hace falta que la metais a la nevera porque el fondant se endurece, se conserva en la cocina en un sitio seco 2 o 3 días.
Y así me quedó. Nada más que por ver la cara de mi hijo, valió la pena todo el trabajo que hice.
Espero que os guste.