Esta es una receta muy adecuada para comidas o cenas navideñas, o para cualquier celebración, porque es deliciosa, y muy lucida de presentación.
Para no perder las costumbres, esta receta es un copieteo-tuneo-mezcla de unas cuantas: de la aleta rellena de mi madre, de Belén, del foro de Mundorecetas, y siempre con mi toque personal, jajaja.
Aunque en casa siempre se ha preparado con aleta de ternera, esta vez el carnicero me recomendó otro corte, que, según dijo, era más apropiado para el relleno, porque la carne queda más tierna y jugosa. Creo que lo llamó "cuadrado de tapa" o algo así... y la verdad es que la recomendación fue muy acertada: la carne quedó deliciosa y en su punto.
Aquí podéis comprobar lo rica que queda con la salsita.
Y vamos ya al grano, con la receta, que me "reñís" después por enrollarme, jajaja.
INGREDIENTES
Ternera (Aleta o cuadrado de tapa-preguntaré el nombre correcto en cuanto vaya a la carnicería-) 1 kg y ½
2 huevos
Un puñado de queso rallado que funda bien.
1 bote de pimientos asados con cebolla (o 2 pimientos asados, y una cebolla)
Champiñones Portobello (Unos 6 o 7 champiñones de buen tamaño)
Sal y pimienta.
Aceite de oliva virgen extra.
Para la salsa: 3 cebollas, 2 dientes de ajo, 1 manzana (ahora completo con lo de Belén), y una copita de
Pedro Ximénez, sal y pimienta (si es necesario).
PREPARACIÓN
Hacer la tortilla con el queso rallado, procurando que no nos quede muy seca.
Desenrollamos la carne (pediremos al carnicero que nos la limpie bien del exceso de grasas y ternillas). Espolvoreamos con pimienta negra o "5 pimientas", recién molida.
Cubriremos con los champiñones limpios y laminados, el pimiento en tiras, junto con la cebolla rehogada (si usamos un bote de pimientos asados con cebolla, nos limitaremos a escurrir el líquido y después repartiremos el pimiento y la cebolla sobre la carne)...
... y la tortilla. Dejamos libre de relleno un espacio de 1-2 dedos, que será la parte que quede arriba del todo cuando enrollemos la carne.
El pimiento lo compré en bote de cristal, asado y rehogado con cebolla. Si no lo encontramos o preferimos hacerlo en casa, asamos el pimiento y rehogamos la cebolla.
Volvemos a enrollar la carne cuidadosamente, como si fuera un brazo de gitano.
Una vez enrollada, podemos meterla en la malla que nos dan en la carnicería, o atarla con un hilo de cocina.
Aquí veis que he optado por la malla. El carnicero me recomendó que, para poder introducir más fácilmente la carne en la malla, me hiciera con un trozo pequeño de tubo de plástico o PVC (los encontraremos en ferreterías o tiendas de materiales de construcción, y son muy baratos), colocara en él la malla, e hiciera pasar la carne por el tubo a través de la malla, como veis en la foto.
De todas maneras, sigue costando un pelín, pero con el tubo se simplifica notablemente la tarea.
Calentamos un chorreón de aceite en una sartén grande, y doramos la carne por todos los lados.
Cuando esté dorada, salpimentamos el rollo de carne por fuera.
Ponemos la carne en la olla a presión, con las cebollas troceadas, los ajos picados, y la manzana pelada y troceada. Rehogamos un momentito.
Añadimos el vino.
Dejamos rehogar un minuto. Tapamos, y cocemos en la olla a máxima presión (con todas las rayitas fuera, en la mía, que es WMF Perfect) durante 25 minutos.
Una vez terminado el tiempo de cocción, esperamos a que la olla pierda presión de forma natural antes de abrirla.
La salsa queda así:
Pasamos la salsa por el chino (queda mejor que con batidora o THX). Probamos el punto de sal, por si hay que salpimentar.
Cortamos la carne cuando esté templada, para no romperla.
¡A comer!.
Un beso a todos, feliz semana, y espero que os guste.