Los pasos para una compra saludable los conocemos, al igual que también, que alimentos deben aparecer en nuestras comidas o cenas.
Sin embargo a veces ocurre que no tenemos muy claro las raciones, proporciones o cantidades que debe contener nuestro plato.
Existen algunas herramientas que nos pueden ayudar a ello.
Pirámide de alimentación saludable
Todos conocemos o hemos visto de reojo en las consultas de los médicos, en los centros de salud colgados de sus paredes, cuadros en los que aparece una pirámide llena de colorines.
Esta famosa piramide nutricional, supuestamente, está realizada con la intención de que la población general comprendamos que grupo de alimentos debemos comer y con que frecuencia.
Desde mi punto de vista la intención es buena, aunque hay partes de esta que no parecen muy lógicas transmitir a la población general.
Por ejemplo, en la parte superior, se hace referencia al consumo ocasional y moderado de productos como: dulces, bollería, snacks e incluso alcohol, pienso que esto, resulta confuso de interpretar para la población, le hace creer que el consumo de estos, si es con “moderación” resulta que no es “perjudicial”…
¿PERO, qué se entiende por moderación…?
Un vez al día, una vez a la semana, una vez al mes, es un término demasiado ambiguo y abierto como para aplicarlo a alimentos que no aportan ningún beneficio a nuestra salud por mucho que se empeñen en hacernos creer lo contrario.
Otra cosa que muy probablemente resulte innecesaria en la pirámide, es la banderita, indicándonos el consumo de suplementos nutricionales, si esta, está hecha para una población sana, esa es su intención, entonces no existe la necesidad de tomar suplementos, no son necesarios.
Por otra parte, la base de una alimentación saludable, ya hemos comentado que son las frutas, verdura y hortalizas, sin embargo aquí nos proponen como base pasta, pan cereales…sin hacer referencia a que su consumo sea integral.
Tampoco es que todo este mal, que ni mucho menos es así, da importancia a la actividad física, tienen en cuenta el estado emocional y las formas de cocinado, cosas realmente muy importantes considerarlas.
En general, y a mi personalmente, no me resulta demasiado esclarecedora en cuanto a que debo comer.
El plato para comer saludable
El plato de Harvard o el plato para comer saludable, es una herramienta más eficaz para que podamos organizar nuestros platos de manera equilibrada y saludable.
Este plato de Harvard, fue desarrollado por un grupo de expertos en nutrición de la Escuela de Salud Pública de Harvard y los editores en Publicaciones de Salud de Harvard, os dejo el enlace a la página oficial en castellano. (aquí)
Lo que aconsejan estos expertos para conseguir una comida equilibrada, es dividir el plato, una primera mitad, se la dedicamos a los vegetales como verduras, ensaladas, caldos…, la otra mitad la dividimos a su vez en cuartos, uno para las proteínas, carnes, pescados, huevos y legumbres, el otro cuarto para los hidratos tipo arroz, pasta, pan…sin olvidar siempre que en este grupo de alimentos deben predominar los integrales.
Para aproximar más este plato a nuestra realidad, pasaríamos el consumo de frutas para postre, aunque tampoco es una condición.
El grupo de los lácteos lo podríamos contemplar en el desayuno o meriendas, esto llevado a un entorno más o menos generalizado, puesto que los lácteos no tienen porque resultar imprescindibles, sin embargo su consumo esta bastante instaurado en nuestra cultura
Quizás esta interpretación, resulta mucho más sencilla de comprender que la pirámide nutricional, la visión de un plato es algo mucho más cercano a lo que todos usamos en nuestro día a día.
Todas estas indicaciones están hechas en principio para un adulto sano y con una actividad física moderada.
Os dejo aquí la imagen del plato de Harvard