Hoy os traigo una idea estupenda que me dio mi hermana Ángela. Es mi hermana mayor, nos llevamos 12 años y desde aquí quiero agradecer todo lo que ella significa para mí.
Es una mujer con un corazón enorme. Con apenas 30 años, ya tenía 4 hijos y siempre se las ingenió para sacarlos adelante. Cosía en casa todo el día para aportar ingresos extras a unos precios irrisorios y así podía estirar un poco mas el presupuesto de la comida y demás gastos. Vestía a sus hijos con ropas casi siempre elaboradas por ella que tuneaba año tras año para poder alargarles mas la vida, en su casa nada se desperdiciaba.
En la cocina siempre hizo maravillas utilizando su ingenio para ahorrar al máximo. En su casa no entraban pastelitos ni demás golosinas envasadas, ni falta que hacía, pero hacía unas mermeladas, churros con chocolate, pestiños y demás que nada tenían que envidiar a ninguna de esas guarrerías con las que ahora se alimentan los niños de hoy en día. Era increíble como podía llegar a fin de mes y dar de comer a seis en casa. Ella ha sido y es mi referente como ejemplo de madre, mujer luchadora y persona y es por eso que esta entrada se la dedico a ella, "Mi maestra.
Y vamos con la idea:
Todos sabemos que para hacer flan en el horno de forma tradicional le has de dedicar tiempo y cuidado, por no decir lo que sube el recibo de la luz cada vez que ponemos el horno en marcha. Así que la idea consiste en hacer la mezcla de los ingredientes, de lo que queráis hacer los flanes, ponerla en botes de cristal, de los de hacer conservas, cerrarlos y colocarlos en una cazuela con agua hasta mas o menos un pelín mas de la mitad de la altura de los tarros.
Poner la cazuela al fuego, si lo hacéis en vitocerámica, la apagáis en cuanto quiere empezar a hervir el agua porque se acaban de hacer con el calor residual que le queda a la placa y si es con fuego lo bajáis un poco para que no borbotee los botes y lo dejáis hervir a fuego suave 2 o 3 minutos.
Al finalizar, le ponéis la tapa a la cazuela y los dejáis hasta que se enfríen un poco antes de sacarlos.
Se dejan enfriar en la nevera y listo.
Esta manera de hacer los flanes es ideal para dietas ya que no es necesario ponerles caramelo líquido.
Además se pueden hacer de lo que se os ocurra.
Se pueden aprovechar tarros pequeños de conservas que hayamos consumido. En mi caso he reutilizado unos pequeños de los de las puntas de espárragos o de corazones de alcachofas porque tienen el tamaño ideal.
Yo en esta ocasión los he echo ligeritos, solo he mezclado medio litro de leche con 3 huevos y dos claras, 2 cucharadas soperas de edulcorante y un poco de aroma de limón y canela.