Hola a todos, aquí estoy de nuevo con otra receta que espero que os guste.
Desde hace años me rondaba la idea de hacer embutido de lomo en casa pero no me atrevía porque me asustaba un poco la receta, ya que la carne no se cocina y al tener que ponerla a secar temía por la contaminación y demás... pero tras probarla me asombró mucho el resultado y desde entonces lo tengo siempre en casa disponible para cualquier ocasión y la verdad es que me soluciona muchos imprevistos, ya sea para aperitivos, acompañamientos o simplemente para picar entre horas.
Es muy sencillo de hacer y más sano que muchos de los embutidos que nos venden en los supermercados, cargados de grasas, conservantes, féculas y demás...
Mirar que pinta!, espero que os atreváis a hacerlo.
Como ya os he dicho, en esta receta no se cocina nada, por eso es tan sencillo de hacer. Y en cuanto le cojáis el gusto seguro que experimentaréis con diferentes especias y tiempo de secado....pudiendo así adaptarla a vuestro gusto.
Y ahora os explico como lo hago yo:
Lo primero de todo es escoger un buen trozo de lomo de cerdo de la mejor calidad posible y si es Lomo Ibérico, aún mejor.
El lomo ha de estar lo mas limpio posible de nervios y grasa , esto se hace muy fácil con un cuchillo bien afilado.
El siguiente paso es ponerlo cubierto de sal, muy gruesa, de las de hacer salazón o la dorada al horno.... Ha de quedar completamente cubierto. Lo ideal es ponerlo en una fiambrera que se pueda tapar y llevar a la nevera y lo dejaremos en salazón de 6 a 8 horas, no más, para que no quede salado.
Una vez transcurrido ese tiempo, se saca de la sal, se limpia bajo el grifo de forma rápida para que no se humedezca demasiado y se seca muy bien con servilletas de papel o un trapo limpio todo lo que podamos.
Así queda después de salarlo.
Y ahora es cuando cada uno le puede dar su puntillo combinando sus especias preferidas.
Yo suelo ir cambiando y así voy probando diferentes sabores.
En esta ocasión lo aliñé con ajo, pimienta, pimentón y aceite de oliva.
El ajo puede ser seco o mejor fresco y machacado con el resto de especias y el aceite.
Para ello, pongo un papel de horno extendido, coloco el lomo y lo embadurno todo con la mezcla de especias y aceite por todos los lados. Os recomiendo que quede bastante aliñado.
Pongo el papel de horno porque así apenas ensucio nada y después me sirve para envolverlo pero también se puede utilizar film de cocina ....
Lo dejo macerar, metido en una bolsa y en la nevera, durante 2 o 3 días.
Y por último, se pone a secar, colgado por un extremo con una cuerda, en un lugar bien aireado y que no le de el sol, durante unos días (todo depende del clima). En verano suele estar listo en un par de semanas y en invierno una o dos semanas más.
Yo lo pongo en el pasillo de una pequeña bodega que tengo donde hay corriente de aire pero también se puede dejar en una galería o habitación bien ventilada.
Hay que ir observándolo y si se empieza a enmohecer limpiarlo con aceite de tanto en tanto con la ayuda de una brocha o servilleta de papel.
El punto de secado es muy particular, se ha de ir tocando hasta que lo encontréis a vuestro gusto e ir haciendo diferentes pruebas.
A la hora de servirlo, os aconsejo que lo cortéis en lonchas lo más fino posible.