Pues sí, habéis leído bien, con vinagre.
Sencillísimo de preparar y que podéis comerlo como compota para rellenar un bizcocho, como mermelada para untar en las tostadas o simplemente así como postre.
INGREDIENTES
250g de Fresas (Las que están feuchas para comer
si que se pueden usar ahora)
4 Cucharadas soperas de Azúcar
1 Cucharadas de Vinagre de Vino
Cortamos las fresas en trozos de 1cm aproximádamente y le espolvoreamos por encima el azúcar.
Añadimos el vinagre.
Removemos el azúcar, el vinagre y las fresas y metemos en la nevera una hora como mínimo. Veremos que las fresas empiezan a sudar y a sacar su propio zumo.
Una vez que estén tiernas y con caldico si queréis hacer una compota las podéis chafar un poco con un tenedor y si no pues dejarlas así como postre.