Una recetilla de galletas caseras muy sencilla, tienen un sabor mas suave que las galletas de mantequilla y son un vicio, no puedes comerte solo una. Además si os sobra masa, la podéis congelar y se pueden comer así tal cual o adornarlas con fondant.
Se conservan muy bien muchos días, bien cerradas en un táper, poniendo una servilleta de papel en el fondo para la humedad.
RECETA DE GALLETAS DE NATA (crema de leche)
Ingredientes:
-200ml de nata (crema de leche) liquida para montar
-1 yema de huevo
-1/2 vaso de aceite de girasol
-1 vaso de azúcar
-Harina, la que vaya admitiendo
-Papel de horno
Mezclar en el bol todos los ingredientes excepto la harina y mezclar todo bien con ayuda de una batidora.
Ir agregando poco a poco la harina y seguir mezclando con la batidora hasta que empieza a endurecer y continuar con una cuchara o con la mano. Conseguir una masa mas bien blanda, no demasiado compacta y que no se pegue en las manos.
Precalentar el horno a 180º C con calor arriba y abajo.
Formar una bola y dividirla en 4 partes. Amasar con ayuda de un rodillo sobre papel de horno al grosor deseado e ir cortando con cortapastas.
Yo usé la mitad y la otra la metí en una bolsa y la guardé en el congelador para usar en otra ocasión.
Con esa cantidad me salieron unas 48 galletas, pero usé moldes de diferentes tamaños como podréis ver en las fotos.
Ir colocándolas sobre la bandeja del horno forrada también con papel.
Hornear durante 10 minutos o hasta que empiecen a estar doraditas, el tiempo dependerá de cada horno o del grosor que le hayamos dado a las galletas.
Una vez hechas, sacar y dejar enfriar sobre una rejilla.
¡A disfrutar de estas suaves galletas!