Seguridad en la cocina al 100%
¡Ponte los guantes...!
¡Ponte los guantes...!
¡Ay...!
Pues eso. Que eso es lo que te pasa cuando te descuidas.
¿Sabías que junto con el cuarto de baño, la cocina es uno de los lugares de la casa en el que más accidentes ocurre?
Cortes y quemaduras son los accidentes a los que estamos expuestos todos los que trabajamos en la cocina, ya sea en un ambiente laboral o doméstico.
¿Sabías que los brazos y las manos son las partes más afectadas?
¿Y a qué esperas para ponerle remedio?
¿A qué esperas para ponerte unos buenos guantes para cocinar?
Como ya he dicho anteriormente, los cortes y las quemaduras están a la orden del día en la cocina.
Los guantes para cortar son menos frecuentes en el hogar porque en casa trabajamos más relajados. Salvo los guantes de protección para cuando cortas jamón, y que solo usas en las Navidades, no es común tener uno. Por supuesto, sí deben tenerlos carniceros, charcuteros y demás oficios en los que el trabajo con los cuchillos es diario.
Sin embargo, cuando hablamos de guantes de protección contra quemaduras, la cosa cambia. Los que cocinamos en casa todos los días, sabemos que la posibilidad de quemarte es muy alta, sobre todo si no tienes los guantes adecuados.
Podemos distinguir entre 3 tipos de guantes según su forma: guantes, manoplas y mini manoplas.
Los guantes para mí son los mejores y más seguros. El que tengas libres todos los dedos y puedas agarrar algo como si tu mano estuviera sin nada es realmente una gran comodidad. Claro, son más caros y más difíciles de encontrar. No sé por qué se empeñan en vender manoplas con lo incómodas que son. Las mini manoplas, son ya el no va más. Son difíciles de sujetar, la mano queda libre de protección. Vamos que estas las dejaría para casos muy concretos en los que la quemadura fuera muy difícil de que ocurriera.
Dentro de los guantes, cabe destacar los guantes largos que te cubren todo o casi todo el antebrazo. Esos son ideales para cuando sacas bandejas de horno ya que, y seguro que no soy la única, no siempre abrimos la puerta del horno totalmente. Con lo cual, al intentar coger la bandeja de dentro te quemas arriba y/o abajo con la puerta o con el marco del horno. ¿Cierto? Ya decía yo.
En cuanto a los materiales, a groso modo, podemos identificar diferentes tipos de guantes: silicona, algodón, neopreno, aramida, etc. Hay guantes que combinan algunos de estos materiales haciendo el agarre y la protección mucho más eficaz. La aramida es una fibra sintética muy robusta y resistente al calor. Se utiliza para fines militares y en el campo aeroespacial. El famoso Kevlar es una marca que trabaja guantes de aramida, entre otras cosas.
Los guantes de silicona y los de algodón son los menos resistentes. Los de algodón tienen además otro contra y es que no se pueden mojar. El agua hace que el calor traspase el guante y te quemes, por eso, cuando tengas que cocinar con líquidos, evítalos.
Estas son las mías. Tengo que ponerle remedio.
Yo tengo unas mini manoplas de neopreno y unas de silicona. Las de neopreno aguantan mejor el calor que las otras cuando pasa un poco de tiempo. Sé que necesito unos guantes como Dios manda. Tengo que ponerle remedio.
Pero, si vas a comprarte unos guantes en condiciones, que aguanten 500ºC, por ejemplo para hacer una buena barbacoa o parrillada, o simplemente para tu horno, te aconsejo los que llevan aramida. Y si te protegen más que la mano, mucho mejor. Si quieres ver los 5 mejores guantes de cocina, haz click aquí.
Y, después de toda esta información, ¿cuáles son los guantes que normalmente usas para cocinar? Cuéntamelo en los comentarios que ya sabes que me encanta leerlos y si me dejan, contestarlos.
¡Hasta pronto!
P.D. Este post está patrocinado por www.mejoresguantes.com, pero todas las opiniones en él son mías. Ya sabes que siempre intento traeros lo mejor y poneros al día de todo lo que ocurre por el mundo de la cocina.
Fuente: este post proviene de Pattys Cake, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: