Antes de nada: si estás a dieta y no quieres acabar con ella de forma rotunda, pincha aquí.
Si no estás a dieta pero no quieres comerte algo tan sumamente delicioso, pincha aquí.
Si has llegado a esta punto es porque has querido, no porque te haya obligado... aunque con imágenes como estas cualquiera no puede resistirse...
Mmmmmmmh!
He cogido como base una receta de mi nuevo libro, Nueva York. Recetas de culto. Es un libro fantástico, que os va a encantar si os gusta mucho la gastronomía yanki. Tiene todas las recetas míticas, incluyendo smoothies, hamburguesas o dulces tan tentadores como los rice krispies.
Sin embargo, a mí me gusta mucho cambiar las recetas. Un poco. Un pelín. Darles mi toque personal. Así que lo que he hecho ha sido cubrir los kriespies con caramelo, chocolate y una capa de diferentes crujientes. Es decir: he multiplicado las calorías por un millón. Pero da igual. ¡Están buenísimos tal que así!
La verdad es que conforme escribo la receta me vienen a la cabeza diferentes versiones y combinaciones: chocolate, menta, fresas, frambuesas... he decidido no apuntarlas porque si no me voy a pegar las próximas semanas haciendo rice krispies, lo cual está muy bien, pero la gente a la que se los endorso acabará cansándose de tanto dulce de arroz inflado.
¡Mejor quitarme la idea de la cabeza!
Delete, delete, delete...
Pero lo mejor de esta receta es el título. No lo neguéis. No es lo mismo que en un bar os digan:
- ¿Quieres unos cuadrados de arroz inflado cubiertos con chocolate, caramelo y crujientes?
A que os pregunten:
-¿Te apetece unos Chocolate&Caramel Crunchy Rice Krispies?
¡Imposible decir que no a esto último! No sabes realmente lo que es, pero has oído "chocolate", "caramel" y "crunchy". Eso suena muy pero que muy bien.
- Uno de esos por favor... ¡con doble de todo!
(Sí, ese último añadido siempre queda bien en las películas).
Y ahí lo tienes... el "rice krispie" con "caramel" chorreando, cubierto de "chocolate" y con "crunchy" por encima... ¡Mmmmmmmmh! (por favor, leedlo con pronunciación ingles, ¡es más divertido!).
En fin, que tanto dulce y tanto examen me hacen volverme un poco majara. Casi mejor que os dejo con la receta para que podáis disfrutarlos en casa. Yo me voy a estudiar, que en unas horas tengo examen. Ya solo queda la mitad. ¡Bien! ¡Qué ganas de acabar y encender de nuevo el horno!
¡Disfrutad de los Chocolate&Caramel Crunchy Rice Krispies!
Chocolate&Caramel Crunchy Rice Krispies
Dificultad: Fácil
Raciones: 25
Etiqueta: Aperitivo Dulce
Libro: Nueva York. Las recetas de culto, pág 66.
Para la base:
350 gr de arroz inflado de chocolate
600 gr de marshmallows
75 gr de mantequilla
2 pizcas de sal
Para el caramelo:
150 gr de caramelos toffee blandos
50 ml de nata (crema de leche)
75 gr de chocolate blanco
Cuatro cucharadas de agua
Para la cobertura:
200 gr de chocolate
Frutos secos
Pepitas de chocolate
Cacahuetes de chocolate
Cereales
... ¡Cualquier cosa que tengas en casa!
- Comenzamos preparando la base, hecha de arroz inflado. Yo he usado arroz inflado de chocolate (caja de cereales).
- Para empezar, derretimos con cuidado los marshmallows con la mantequilla en una cacerola, a fuego medio-alto, removiendo de forma constante para que no se nos peguen.
- Tenemos que conseguir una "masa" líquida pegajosa, como la de la imagen. Retiramos en el momento en el que empiecen a salir burbujas.
- En un bol grande colocamos los cereales. Añadimos con cuidado los marshmallows derretidos y removemos bien para que se integre todo perfectamente. Conseguiremos un grumo enorme, horrible, pegajoso... ¡Delicioso! Damos vueltas para que todos los cereales se impregnen bien de marshmallows.
- Engrasamos un molde cuadrado o rectangular. Yo he utilizado uno de 23x23.
- Añadimos con cuidado la mezcla y vamos repartiéndola bien por todo el molde con la ayuda de una espátula. No debemos hacer mucha fuerza, o los granos se romperán. Hay que intentar dejarla lisa.
- Dejamos enfriar una hora en el frigorífico.
- Para la crema de caramelo, ponemos el agua y los caramelos en una cacerola a fuego medio. Debemos dar vueltas de vez en cuando, para que no se peguen los caramelos. Debemos conseguir que se derritan, que no haya ni rastro de caramelos.
- Añadimos la nata (crema de leche) y el chocolate blanco. Este paso es opcional, pero me encanta el leve sabor que deja el chocolate y la textura que le da la nata (crema de leche). Derretimos todo bien y damos vueltas para que se integre todo perfectamente.
- Sacamos el molde del frigorífico y cubrimos todo con el caramelo.
- Llevamos de nuevo al frigorífico y dejamos que se enfríe durante dos horas.
- Pasado ese tiempo, derretimos el chocolate al baño maría. Cubrimos la capa de caramelo con una capa de chocolate.
- En una bolsa metemos los frutos secos que queramos, pepitas de chocolate, cereales, cacahuetes de chocolate... lo que se nos ocurra. Cosas ricas con las que dar un toque crujiente a nuestros rice krispies.
- Aplastamos la bolsa con un rodillo hasta que hayamos roto todo el contenido. No queremos poner trozos enteros, sino migajas, lo suficiente para darle un punto crujiente.
- Espolvoreamos por encima antes de que se enfría el chocolate.
- Dejamos enfriar durante al menos una hora.
- Cortamos con un cuchillo grande, de sierra mejor, en cuadrados de más o menos el mismo tamaño.
- Servimos en frío.
¡A disfrutar!
- Si el caramelo aún está muy blando y líquido (nunca se va a quedar duro, no nos interesa), podemos metieron 30 minutos en el congelador para que coja más cuerpo. Se recuperará pasado un tiempo a temperatura ambiente.
- Podéis usar arroz inflado blanco. Queda más uniforme el color.
