Hacía ya bastante tiempo que este tema me está rondando la cabeza, pues cada vez que veo publicada alguna flor o bouquet de azúcar y alguien pregunta.. ¿ se come? no se.. se me revuelve el estómago.
Primero vamos a distinguir dos tipos de flores de azúcar:
Las primeras son las flores de fondant, que se estiran, cortan y sin mucho trabajo se pegan en una tarta o cupcake. No van alambradas. Esas sí se pueden comer y no pasa nada.
Las segundas, como las de la foto, son las flores en pasta de azúcar alambradas, aquellas que se hacen pétalo a pétalo, que llevan mucho trabajo, técnica, estambres y generalmente son pintadas a mano. Son flores muy trabajadas y se usan para bouquets o para adornar tartas de boda.
Bueno, mi opinión personal es que las flores alambradas, si bien es cierto, se podrían comer porque están hechas con elementos comestibles (excepto estambres, alambres, cinta floral, etc.), su fin último no es comerlas. Su fin último es adornar una tarta y que ojalá queden de recuerdo. Este tipo de bouquets y de flores de llaman comestibles porque son aptas para estar en contacto con tartas, pero según mi punto de vista (muy personal por cierto) no se deberían comer; especialmente porque cada flor y cada ramo son únicos y originales; son más una obra de arte que un objeto para ser "engullido".
Y tu.. qué opinas? ¿cuál ha sido tu experiencia? ¿te ha pasado haber hecho una flor preciosa y se la hayan comido? Me encantaría saber tu experiencia.
Un abrazo y gracias por leer mi blog.
Sonia