Hay pocos dulces tan versátiles como las magdalenas. A nosotras nos encanta experimentar con ellas añadiéndoles diferentes ingredientes y así sorprender a la familia ya de buena mañana. Esta vez las hemos preparado con chocolate blanco y semillas de amapola. El resultado, una forma exquisita de empezar el día.
¿Qué necesito?
2 huevos
1 taza de nata (crema de leche)
1 taza de azúcar
1/2 taza de aceite de girasol
2 tazas de harina
100 grs. de gotas de chocolate blanco Valor
1 cucharada de semillas de amapola
1 cucharadita de levadura
Un poco más de azúcar
¿Cómo lo hago?
Primero ponemos la nata (crema de leche) en un cazo y le añadimos las gotas de chocolate blanco Valor. La ponemos a fuego bajo y revolvemos hasta que el chocolate se funda completamente. Reservamos.
Por otro lado, en un bol grande, batimos los huevos, y vamos añadiendo, batiendo después de cada paso, el aceite, el azúcar, la nata (crema de leche) con el chocolate (que ya estará templada) y por último la harina tamizada con la levadura. Revolvemos todo bien hasta que quede una masa homogénea y líquida. Para acabar echamos las semillas de amapola.
Precalentamos el horno a 180º.
Colocamos la masa en los moldes para magdalenas hasta que quede a un centímetro del borde, más o menos.
Ponemos un pellizco de azúcar sobre la masa, en el centro de cada magdalena y las metemos en el horno durante 30 minutos aproximadamente.
Ahora solo queda esperar a que se enfríen, preparar un buen café y disfrutar de ellas.
Con esta receta participo en el 3º Aniversario de los retos de CdM - Cocineros del Mundo