Las orejas de carnaval son un dulce típico de Galicia y León que recibe su nombre por su parecido con las orejas de cerdo, que se le da durante su elaboración, aunque no es fácil de conseguir. Lo que sí es fácil es la receta, que no tiene complicación y se hace con ingredientes sencillos para tener un dulce crujiente, ligero a pesar de estar frito y que va perfecto para acompañar un café o una copita de licor. Y es que este postre, tan típico de las fechas de carnaval, lleva anís entre sus ingredientes lo que le aporta un ligero sabor y aroma muy apetecibles. Otro de sus ingredientes es la manteca de cerdo que se puede sustituir por mantequilla. Sin mas os dejo con la receta y espero que os guste.
Orejas de carnaval
Ingredientes
310 g de harina de fuerza
50 g de manteca de cerdo
115 ml de leche
25 ml de anís
50 g de azúcar
1 huevo L
ralladura de limón
una pizca de sal
aceite para freír
azúcar glas para espolvorear
Preparación de las orejas de carnaval
Primero tenemos que sacar la manteca de cerdo de la nevera un rato antes para que esté a temperatura ambiente. Rallamos la piel de un limón y reservamos.
En un bol ponemos la leche, el anís, el azúcar, el huevo, la manteca, la ralladura de limón y una pizca de sal y batimos hasta tener una crema homogénea.
Cuando la tengamos añadimos la harina y mezclamos hasta que tengamos que amasar con la mano hasta tener una masa lisa, un poco pegajosa.
La dejamos reposar una hora en la nevera y luego hacemos bolas del tamaño de una nuez, a mí me salieron unas 16 bolas.
Estiramos cada bola con un rodillo dándoles forma ovalada y dejándolas lo mas finas posible. En una sartén o cazuela calentamos aceite y las freímos a fuego bajo-medio hasta que estén doradas, dejamos que se hagan primero por un lado y luego por el otro.
Cuando estén fritas las vamos a ir dejando sobre papel de cocina absorbente para eliminar el exceso de aceite. Una vez frías las espolvoreamos con azúcar glas.