Que ganas tenía ya de que pasaran las fiestas, sinceramente quería dejar atrás este año maldito. Perdonarme por estar un par de semanas ausente, pero sinceramente ni ganas tenía de encender el ordenador.
Pero este año empiezo con muchas ganas y mirando adelante positiva, así que seguro que os podré enseñar muchas cosas ricas porque tengo muchísimas ideas.
La primera receta del año es con el reto Receta2 que tengo con mi amiga Leny de Cocina de muerte Lenta, algo super rápido y fácil que es la oportunidad perfecta para comer un pan recién hecho con un sabor muy peculiar. Un pan de soda tipico de Irlanda, ella nos prepara el clásico y yo con una mezcla de ingredientes muy castiza...jejeje.
No necesita ni amasado ni levado, así que es ideal para los amantes de las prisas y que tienen poco tiempo. Se mezclan los ingredientes y se forma una bola, se hornea y se come. Simple no?
INGREDIENTES
250gr harina blanca panificable o de fuerza
250gr de harina integral
420ml de butermilk
1 cucharadita de postre de sal
1 cucharadita de postre de bicarbonato sódico
100gr de queso manchego
100gr de olivas verdes rellenas (enteras o rodajas)ELABORACIÓN
Mezclamos las harinas en un bol con la sal y el bicarbonato. Con la misma mano podemos hacerlo.
Para hacer el buttermilk casero solo hace falta añadir 15ml de zumo de limón por cada 240ml de leche. Dejamos reposar 10 minutos y removemos con una cuchara. Listo para usar.
Vamos añadiendo el buttermilk a la mezcla de harinas poco a poco y con la mano vamos mezclando. Haremos lo mismo con el queso y las olivas y volvemos a mezclar.
Ponemos la masa en la encimera espolvoreada de harina, formamos una bola grande y disponemos en la bandeja de horno con papel sulfurizado. Hacemos 4 cortes transversales en la masa, como si hiciéramos una cruz pero sin cortarla en el centro, solo por fuera. Esto facilitará el horneado.
Espolvoreamos un poco de harina por encima y horneamos 30 minutos a 200.