· 1 pollo despiezado (menos las pechugas)
· 2 cebollas,
· 4 papas,
· 3 o 4 zanahorias,
· 1/2 vaso de vino blanco,
· 400ml de crema de leche,
· sal, aceite y pimienta.
Preparación:
Antes de pasar a la acción, comenzamos limpiando y cortando el pollo en trozos más pequeños (salvo que ya os lo haya hecho el carnicero). Separamos los muslos de los cuartos traseros y retiramos el costillar de las alas. También limpiamos la piel para que no queden restos de pelos.
Con el pollo trozado y salpimentado, ponemos un chorro de aceite a calentar en una sartén grande, en la que doraremos bien las piezas por ambas caras. Luego retiramos el pollo y añadimos la cebolla en juliana y las zanahorias pelada y cortadas en rodajas.
Salteamos un buen rato, volvemos a poner el pollo, vertemos el vino blanco, bajamos un poco el fuego y dejamos que se haga con sartén tapada durante 25-30 minutos. Cuando el pollo esté tierno, añadimos la crema de leche, ajustamos de sal .
Bajamos el fuego al mínimo y dejamos que la salsa espese. Para servir podemos acompañar el pollo a la crema con unas papas fritas cortadas en dados que le van de maravilla, o incluso podemos añadirlas junto con el resto de verduras al cocer el pollo.
Tiempo de elaboración | 45 minutos
Dificultad | Fácil