¿Que entendemos por Kéfir?
La palabra procede de “keyif” cuyo significado es “sentirse bien”. Se trata de una rica bebida fermentada, que combina bacterias lácticas con cultivos de levadura. Su aspecto es parecido al de la coliflor y al añadir estos granos de kéfir en la leche de cabra o vaca, los microorganismos empiezan a fermentar los azúcares de la leche dando lugar a esta bebida tan saludable.
Beneficios que aporta el Kéfir
Entre los muchos beneficios que puede aportarte esta bebida destacamos:
La inhibición de células cancerosas
Algunos estudios han demostrado como ingerir kéfir reduce la formación de compuestos cancerígenos e inhibe el desarrollo de tumores.
Los problemas de digestión
Los microorganismos del kéfir se alojan en el intestino y ayudan a mantener el equilibrio de las bacterias intestinales. Por eso, su consumo puede ser beneficioso contra las infecciones provocadas por bacterias y el síndrome del intestino irritable.
El retraso de la osteoporosis
Puesto que esta bebida es rica en calcio y vitamina k2, ayuda a mantener una buena salud osea y a prevenir la aparición de la osteoporosis. Además, en algunos casos, puede aumentar la capacidad de absorber calcio, lo que da como resultado un aumento de la densidad osea y la prevención de posibles fracturas.
La intolerancia a la lactosa
Las personas con intolerancia a la lactosa que no pueden digerirla adecuadamente, son capaces de consumir kéfir de forma exitosa ya que este, descompone la lactosa en ácido láctico. Por eso, los intolerantes a la lactosa no tienen problemas a la hora de consumir kéfir.
¿Cómo consumir o preparar kéfir?
El kéfir se puede compra ya elaborado por marcas como Pastoret o Suerte Ampanera o bien puedes tratar de conseguir unos granos de kéfir para elaborarlo en casa. Es muy fácil y te llevará poco tiempo. Si tienes algún amigo o conocido pídele que te de unos granos de Kéfir, este tiene una asombrosa capacidad para reproducirse y en poco tiempo serás tu el que pueda regalárselo a otra persona. Sino puedes mirar en alguna tienda especializada.
Para elaborarlo sigue los pasos que te indicamos a continuación:
Consigue un tarro de cristal para meter tus granos de kéfir.
Vierte leche de vaca o cabra, semdidesnatada o entera, en el recipiente dejando dos o tres dedos de aire por encima.
Cierra el tarro y mete el bote en un armario en donde no le de la luz.
Déjalo por 24 horas reposar, cuanto más tiempo lo dejes más espesura cogerá.
Por último, vamos a colar el kéfir con ayuda de un colador para quedarnos por un lado con el yogur y por otro con los granos de kéfir.
Toma el yogur líquido (puedes meterlo un tiempo en el frigorífico si prefieres tomarlo frío) y vierte de nuevo los granos de kéfir en el tarro de cristal, añadiendo más leche.
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